Nueva discrepancia entre los dos expresidentes del Gobierno socialistas en España a cuenta de Venezuela. José Luis Rodríguez Zapatero cree que el actual jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, "no se equivoca, acierta" no recibiendo al presidente interino del país caribeño y líder de la oposición, Juan Guaidó, que visitará este sábado Madrid y se verá con la ministra de Exteriores, Arancha González Laya. Una posición contraria a la mantenida por Felipe González, que considera al opositor al régimen de Nicolás Maduro el "único representante legitimado" de Venezuela.
Ha sido Zapatero, que ejerció de mediador entre el régimen y la oposición, quien ha abierto la espita esta vez con una entrevista en la Cadena Ser en la que se ha mostrado convencido de que el "enfoque" sobre Venezuela "antes o después tendrá que cambiar en muchas actitudes políticas y cabezas" porque es un "error" promover sanciones económicas que hacen sufrir a un pueblo "y no llamar al acuerdo, al entendimiento entre dos sectores de la sociedad".
"El principio de la legalidad internacional, la salida pacífica de los conflictos debe tener más vigencia que nunca después de lo vivido en Oriente Próximo e Irak", ha sostenido tras recordar que él "algo" sabe de Venezuela, adonde ha viajado en 38 ocasiones.
Desde 2016, Zapatero ejerció una labor como mediación que se concretó en la liberación de algunos presos políticos pero que terminó fracasando en 2018 porque la mayoría de la oposición percibía al español como una figura demasiado escorada hacia el régimen de Maduro.
El expresidente no se ha pronunciado sobre el polémico encuentro entre el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, con la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, durante una escala técnica en Madrid porque tampoco se le ha preguntado por ello, pero sí ha cuestionado la situación creada en la comunidad internacional desde el reconocimiento de Juan Guaidó.
En concreto, se ha referido a la decisión del Gobierno de EEUU de dar los bienes y activos del Ejecutivo de Venezuela "a unos señores que no tienen ningún título más que se reconocieron (...) miles de millones que nadie controla y están por ahí, una situación para el derecho internacional insólita para la seguridad jurídica, las empresas, los españoles que están allí".
Zapatero ha reconocido que, a este respecto, la posición de España ha sido de "prudencia" al mantener relaciones con las dos partes, una de las cuales, el Gobierno de Maduro, guste o no es el que retiene el "control de la autoridad". El expresidente ha advertido también de que, en su opinión, el 90% de la información que le llega a los ciudadanos españoles sobre Venezuela está "sesgada hacia una dirección".
Contacto entre González y Guaidó
La posición de Zapatero choca frontalmente con la mantenida por Felipe González, que ha subrayado que considera al presidente encargado de Venezuela como "único representante legitimado democráticamente" del país, "de acuerdo con la Constitución de Venezuela".
Después de las declaraciones de Zapatero, González ha emitido un comunicado para reconocer al líder opositor cómo único representante legitimado democráticamente "frente al poder fáctico representado por la tiranía de Maduro y sus apoyos espurios de la llamada Asamblea Constituyente, del Tribunal Supremo o de la cúpula militar". No es la primera discrepancia que mantienen ambos expresidentes socialistas sobre la situación política en Venezuela.
"A Maduro sólo hay que creerlo cuando dice que nunca más convocará elecciones para perderlas. Por eso controla el Consejo Nacional Electoral y los poderes citados", advierte González en la nota, recogida por EP.
González, que se mantiene en contacto con Guaidó, avisa de que la democracia en Venezuela "ha desaparecido" y ha sido "sustituida por una dictadura tiránica que ha convertido a la República en un estado fallido".