
Las cesiones y esfuerzos que tendrá que hacer Unidas Podemos para poder formar parte de un Gobierno de coalición con el PSOE son ya son oficiales. En una carta a la militancia, admite que los morados tendrán que transigir con lo que pidan los socialistas situación y asumir "muchos límites y contradicciones".
"Vamos a gobernar en minoría dentro de un Ejecutivo compartido con el PSOE, en el que nos encontraremos muchos límites y contradicciones, y en el que tendremos que ceder en muchas cosas. Y, de nuevo, habrá quienes inviertan muchos millones de euros y muchas horas de televisión en tratar de desmoralizarnos, de frustrarnos y de convencernos de que no se puede", indica Iglesias en la misiva, a la que ha tenido acceso 'elEconomista'.
De esta manera, el líder de Podemos da a entender que las negociaciones no se romperán por la falta de concesiones de los suyos, como ya vienen dando a entender fuentes cercanas a la negociación desde que se firmara el preacuerdo de coalición este martes. Con todo, cabe recordar que el PSOE y Unidas Podemos todavía no han recabado apoyos suficientes como para tener amarrada del todo la investidura de Pedro Sánchez.
En cualquier caso, también recuerda que "los avances que más merecen la pena no se consiguen a la primera". "Durante estos días escucharéis a muchos opinadores atribuir las causas del acuerdo que hemos alcanzado con el PSOE para formar el primer Gobierno de coalición de nuestra democracia a la astucia de tal dirigente o al talento de tal asesor. Nada más lejos de la realidad. Este acuerdo ha sido posible gracias a vosotros y a vosotras, al esfuerzo cotidiano de miles de personas anónimas que nunca bajasteis los brazos y que habéis seguido empujando", precisa.
Reforzar el partido
Por otro lado, en el texto, Iglesias llama a hacer más fuerte el partido aprovechando la presencia en el Gobierno. "Tenemos también por delante la tarea de fortalecer nuestra organización y nuestros círculos. Hoy, más que nunca, es necesario echar raíces y construir una herramienta fuerte y sólida, que esté presente en cada barrio y en cada pueblo, que sea capaz de doblar el brazo a los poderosos y de producir transformaciones profundas que hagan avanzar a nuestro país hacia la justicia social, la mejor vacuna frente a quienes pretenden enfrentar al penúltimo contra el último para que sigan ganando los de siempre".
En este sentido, ha vuelto a cargar sobre el enemigo habitual en sus diatribas: "Los partidos de la derecha y los brazos mediáticos del poder económico van a golpearnos muy duro a cada paso que demos, por pequeño que sea. "Habrá quienes inviertan muchos millones de euros y muchas horas de televisión en tratar de desmoralizarnos, de frustrarnos y de convencernos de que no se puede".