El vicepresidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, considera que la actual crisis política de la región solo se puede resolver mediante el diálogo político y para ello ha propuesto retomar la declaración de Pedralbes pactada entre el Estado y el Govern el pasado mes de diciembre. Eso sí, para ello ha opinado que antes se tendría que haber llevado a cabo la amnistía de los sentenciados por el 'Procés', aunque al mismo tiempo ha afirmado que "el camino a la independencia es irreversible. La opinión pública española debe entender que, para millones de catalanes, el autonomismo ha muerto", unas palabras que por sí mismas 'matarían' cualquier posibilidad de negociación. Acceda al DIRECTO de reacciones sobre la sentencia del Procés en Cataluña
Así lo ha indicado el también consejero de Hacienda y Economía en un desayuno informativo organizado por Europa Press en Madrid, quien ha precisado que en la mesa de diálogo recogida en la declaración de Pedralbes tendrían que estar presentes los dos gobiernos, "que pueden estar acompañados de las mayorías parlamentarias". Respecto a los términos incluidos en la propia declaración, que abordaron el Gobierno central y la Generalitat a finales del año pasado, ha reconocido que "hay cierta ambigüedad, pero es necesaria para que partes antagónicas se puedan reconocer. Necesitaremos tiempo y enfocar la solución políticamente".
Sin embargo, también ha asegurado que para que este diálogo bilateral se retome es necesario que se amnistíe a Oriol Junqueras y a los otros políticos sentenciados por su vinculación en el procés. "Sería razonable que todos los viéramos así. Tiene que haber soluciones para los encarcelados. Así no se puede iniciar el diálogo", ha afirmado. De hecho, para él la solución no pasa por un indulto sino por la amnistía, "que dice que no se ha cometido un delito. Esto nosotros lo vamos a proponer en el programa electoral del 10 de noviembre". Con todo, ha admitido que "nunca se ha desarrollado esta cuestión y no está clara su reglamentación. No tiene que ser una ley orgánica".
Conflicto entre Sánchez y Torra
Respecto a la relación entre Pedro Sánchez y Quim Torra, como responsables del Gobierno de España y de la Generalitat, respectivamente, y la comunicación entre ambos tras los disturbios en Barcelona, ha afirmado que "Torra ha condenado la violencia con claridad. Ese obstáculo nunca ha existido para que Sánchez hable con él. Si no lo hace, es por miedo a un desgaste electoral". En este sentido, ha revelado que él sí ha mantenido contactos con la vicepresidenta Carmen Calvo durante la semana pasada.
Sobre las preocupaciones de los empresarios por el impacto que la crisis política puede tener sobre la economía catalana, Aragonès ha argumentado que "la fortaleza de la economía catalana ha rechazado los malos augurios uno tras otro. Las estimaciones de crecimiento tras el 1 de octubre se mantuvieron, aunque hubo quien vaticinó un crecimiento cero. La economía es fuerte y va a resistir".
Aragonès además ha alertado del impacto negativo que podrían llegar a tener las elecciones del 10 de noviembre para la situación de Cataluña. A pesar de que asegura que el independentimo va a mejorar sus resultados en las próximas generales, el también miembro de ERC ha alertado de que un Gobierno del PSOE permitido por el Partido Popular agravaría la situación.
"Sánchez podría protagonizar la primera gran coalición de la democracia, pero esto sería una pésima noticia para el fin del conflicto", puesto que ha opinado que la influencia de los 'populares' provocaría la "estandarización" del enfrentamiento. "La complejidad del momento exige un estadista, no un candidato. No es el momento de regates en corto, ni de laboratorios electorales. El bloqueo en el que estamos no beneficia a nadie".