Política

El PSOE da por hecha la investidura y Sánchez anuncia un alud de gasto

  • Se 'olvida' del Gobierno de coalición y de Cataluña en su discurso de investidura
  • El socialista recupera su intención de derogar los aspectos más lesivos de la reforma laboral
  • Escasa mención a la fiscalidad pero sí se ha acordado de Madrid Central
Pedro Sánchez, durante el debate de investidura.
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El esperado discurso inaugural de Pedro Sánchez en la sesión de investidura generó más contenido por sus ausencias que por sus propuestas. Por un lado, no hubo ni una sola mención del Gobierno de coalición - que no mencionaría hasta más tarde, durante sus respuestas a los grupos parlamentarios- que el socialista está negociando con Unidas Podemos para que sus diputados apoyen su candidatura, un acuerdo que en Ferraz ya se da por hecho. Por el otro, propuso varias iniciativas que llevarán a un severo aumento del gasto social y la inversión pública, pero ni una sola referencia para su financiación.

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El presidente en funciones se comprometió a numerosos incrementos del gasto social. Además de sus numerosas propuestas en el campo de las pensiones, su apuesta pasa por hacer gratuita la escuela infantil de cero a tres años, una gratuidad que quiere ampliar a toda la educación hasta el primer año de universidad.

A esto hay que sumar su compromiso de poner en marcha las partidas estatales para dependencia, a día de hoy bajo mínimos, y ampliar la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud (SNS) para que incluya la salud bucodental, al tiempo que se elimina el copago farmacéutico para colectivos vulnerables.

Además, Sánchez prometió más inversión pública y a impulsar un Pacto de Estado en materia de infraestructuras y transporte, "que garantice el cumplimiento de los planes ferroviarios de alta velocidad actualmente en ejecución, que estudie las conexiones largamente demoradas, como la de Cantabria o la de Extremadura, que determine la inversión en cercanías y las actuaciones necesarias en los corredores Mediterráneo y Atlántico", enumeró el propio Sánchez.

¿Sin ingresos adicionales?

Todo ello medidas que, en el fondo, ya aparecen en el programa de gobierno que hizo público el PSOE la semana pasada. Sin embargo, todas estas promesas de gasto no han estado acompañadas de soluciones para su financiación. De hecho, el presidente en funciones se comprometió a solventar el déficit de la Seguridad Social con nuevos ingresos que no aclaró de dónde iban a salir. En términos generales, Sánchez pasó de puntillas por encima de esta cuestión y de todo lo relacionado con la economía en general.

Aunque sí que mencionó los objetivos de PIB -2,2% de crecimiento- y de déficit del Gobierno -2% del PIB- para el presente año, así como la mejora de las previsiones económicas, no hubo ni rastro del amplio catálogo de medidas fiscales que manejan los socialistas para mejorar los ingresos, en algunos casos coincidentes con Unidas Podemos, para compensar la más que previsible subida del gasto.

Con todo, sí que hizo mención a la necesidad de "modernizar nuestro sistema fiscal" ante la aparición de las nuevas formas de evasión tributaria respaldadas por la nueva economía digital. "Hace pocas semanas supimos que una conocida plataforma digital audiovisual pagó en España 3.146 euros en concepto de impuesto de sociedades", refiriéndose a Netflix. No es la única. "Esto no solo resulta insostenible sino que atenta contra los más elementales principios de responsabilidad y de justicia social".

Esta hubiera sido la coletilla perfecta para introducir en su discuros la tasa Google y el impuesto a los Servicios Digitales, pero no fue así, aunque el PSOE lo mantienen en su programa de Gobierno.

El presidente en funciones tampoco dedicó una sola palabra al gobierno de coalición ni a los problemas políticos de Cataluña, algo que sus rivales políticos le recordaron en sus intervenciones posteriores.

De hecho, la única referencia a la formación morada llegó al final de su intervención, tras reconocer que PSOE y Unidas Podemos son socios preferentes pero "venimos de culturas muy diferentes". En cualquier caso, asumió que "lo que nos une se resume en muy pocas palabras: la promesa de la izquierda". En cualquier caso, insistió en pedir la abstención de Cs y PP y otras "alternativas al gobierno de coalición".

Parecido destino corrió Cataluña. Los problemas políticos específicos de la región no han tenido presencia dentro del discurso de Sánchez. De hecho, solo se ha acordado de ella como receptora de inversiones y de proyectos tecnológicos, como es el Supercomputador Mare Nostrum 5, en Barcelona. Fuentes del PSOE restan importancia a estas ausencias. Indican que los mensajes de candidato sobre Cataluña iban implícitas en sus palabras sobre las autonomías y su defensa de la diversidad que permite el modelo autonómico. Misma opinión tienen respecto a sus escasas menciones de un gobierno de coalición. Para los socialistas, este era "el discurso de investidura de Sánchez. No tiene nada que ver con la negociación", que consideran que no se debería ver afectada por la alocución del presidente.

En total, Sánchez desplegó 130 propuestas divididas en 12 pactos de Estado, 25 leyes, 90 medidas de otra naturaleza y tres reformas constitucionales, concretamente para evitar situaciones de bloqueo tras las elecciones, para eliminar los aforamientos de los políticos y para eliminar el término "disminuidos" relativo a las personas con discapacidad.

"Un nuevo Pacto de Toledo" que salvaguarde las pensiones

Pedro Sánchez incidió, en su discurso de investidura, en alumbrar un nuevo Pacto de Toledo que "salvaguarde la bóveda de nuestro Estado de bienestar, el sistema público de pensiones", resaltando la caída en la tasa de natalidad, el aumento de la esperanza de vida y el incremento del ratio de las pensiones sobre los empleados.

Para ello, propone consolidar la actualización de las pensiones conforme al IPC real, eliminando el índice de revalorización en vigor; reducir la brecha de género con especial atención a las pensiones mínimas y no contributivas y reformular el factor de sostenibilidad.

También, planteó eliminar, en un horizonte de cinco años, el déficit del sistema de la Seguridad Social.

Un salario mínimo que alcance el 60% del salario medio

El jefe del Ejecutivo en funciones prometió durante su discurso subir el salario mínimo interprofesional (SMI) hasta alcanzar el 60 por ciento del salario medio, de manera que se quedaría cercano a los 1.200 euros al final de la legislatura. Asimismo, prometió rentas de inserción estables y un ingreso mínimo vital para reducir la pobreza infantil.

Insistió en " la derogación de los aspectos más lesivos de la reforma laboral" aprobada por el PP en 2012, y se comprometió a desarrollar su prometido Estatuto de los Trabajadores del Siglo XXI. Además, anunció un Estatuto del Becario con el que se quiere limitar la concatenación de contratos de prácticas y asegurar su remuneración.

Combinando agenda ecológica con el futuro del automóvil

En la carrera por la emergencia climática el PSOE insiste en aprobar la Ley de Cambio Climático y Transición Energética centrados en una de las industrias más polémicas en España ahora mismo: la automoción. Pretenden efectuar una Ley de Movilidad Sostenible para garantizar "el derecho a una movilidad eficaz, intermodal y conectada" mediante el Plan Estratégico de Apoyo Integral al Sector de la Automoción que se ejecutaría entre 2019 y 2025. De hecho, Sánchez reincidió con una indirecta al Ayuntamiento de Madrid: "Nadie va a parar Madrid Central. No puede haber pasos atrás. Es una irresponsabilidad absoluta exponer a España al riesgo de sanciones por parte de las instancias europeas".

La inversión en educación será el 5% del PIB con carácter fijo

El líder socialista insistió en la transformación de la educación con una nueva Ley Básica de Educación que garantice un sistema educativo estable basado en la equidad, inclusión y calidad, que permita la supresión de la LOMCE y la reversión de los recortes. Un cambio "por el conocimiento" que requiere la inversión del 5 por ciento del PIB de España. Además, pretende reconocer el derecho a la educación a lo largo de toda la vida. Un nuevo ecosistema educativo volcado en la inversión de un Plan de Transformación Digital de la Educación y la Formación Profesional. Y, como refleja en su programa, la integración de un módulo de Digitalización en todas las titulaciones de Formación Profesional.

La Ley de Startups que promete relanzar la inversión en I+D+i

España, "el país europeo con la mayor cobertura de fibra óptica hasta el hogar", es el único de la UE que redujo su inversión en I+D+i en los últimos años. El PSOE pretende subirla al 2 por ciento del PIB con una Ley de Startups dentro de una Estrategia de Nación Emprendedora. "Reconocerá la naturaleza específica de las nuevas empresas de base tecnológica, con incentivos fiscales para su financiación y desarrollo", indicó Pedro Sánchez. Teniendo en cuenta que la mayoría son pymes, promete un Marco Estratégico de las pymes 2030 que genere un entorno cambiante, digitalizado, innovador y sostenible, con Planes de Acción que favorezcan su internacionalización y financiación.

Regulación por ingresos reales de la cotización de autónomos

La gran promesa socialista para los autónomos es la regulación de su cotización en relación con sus ingresos reales. Para ello prometen una modificación en el Régimen Especial de los Trabajadores Autónomos (Reta), ampliando también su protección social y fiscal. "Avanzaremos en la mejora de las condiciones de trabajo de los autónomos, universalizando sus derechos laborales y reduciendo trabas y cargas administrativas" predicó Pedro Sánchez en su discurso de investidura. Todo esto con el fin de equiparar la regulación a la de los trabajadores por cuenta ajena. Intentando luchar de esta manera contra la economía sumergida, los falsos autónomos y el abuso en los contratos de formación.

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