
Es casi un mantra ya de ATA insistir en que favorecer el emprendimiento es velar por el mercado laboral y por el crecimiento económico. Esta semana he comparecido ante el Parlamento de Andalucía para valorar el proyecto de Ley de Presupuestos de Andalucía para el próximo año y para poner en valor que las cuentas públicas tienen que velar por la salud de los empresarios más pequeños de la cadena de valor.
Las alarmas están a punto de sonar de nuevo y tenemos que anticiparnos. Los expertos e instituciones apuntan a que la desaceleración, que se ha empezado a dar en el segundo semestre de este año, continuará el próximo año si no se consigue rebajar la inflación. Si la controlamos el año que viene puede ser llevadero, pero si se dispara la desaceleración puede ser importante.
Una vez más vemos cómo esta situación está poniendo contra la pared a los autónomos, ya que venden menos que el año pasado y tienen que hacer un mayor esfuerzo financiero para hacer frente a la subida de tipos de interés, de impuestos, de cotizaciones, de alquileres o de materias primas.
Es imprescindible que quienes gobiernan conozcan de primera mano cómo afecta la situación actual a los trabajadores por cuenta propia, porque solo así se tomarán las medidas adecuadas que permitirán combatir los obstáculos con los que se encuentran a diario en el desarrollo de su actividad. Y pueden tener por seguro que desde ATA no nos vamos a cansar de levantar la voz por los trabajadores por cuenta propia.
Andalucía, entorno amable
Hasta ahora, hemos visto cómo en Andalucía la eliminación de cargas, la creación de un entorno fiscal amable, el hecho de establecer ayudas y de poner en el centro de la agenda política a los autónomos y las empresas, así como no establecer más cargas como estamos viendo en otros territorios a empresas y autónomos, ha sido una receta acertada, pero no hay que dormirse en los laureles y hay que seguir en esta dirección para que los buenos datos económicos y de autónomos se consoliden en nuestro territorio.
Los datos reflejan que hay más autónomos, más empleo, más crecimiento económico y más exportaciones, pero para que esto siga en esta dirección es imprescindible estar al lado del tejido empresarial y los autónomos, restando trabas y dando facilidades. Es positivo que los Presupuestos andaluces para 2024 destinen a las personas trabajadoras autónomas 58 millones, dentro del programa de Trabajo Autónomo y Economía Social.
A esta línea hay que sumar las líneas presupuestarias destinadas al programa de políticas de activas de empleo y consideramos vital que se destinen 5,5 millones de euros a empresas comerciales para su modernización, ya que el auge del comercio electrónico, la fiebre de los descuentos permanentes y la alta presión inflacionaria, con el consiguiente frenazo del consumo, están disminuyendo a pasos agigantados las posibilidades de supervivencia del comercio tradicional.
Cultura preventiva
Sin embargo, consideramos imprescindible que se incrementen las partidas presupuestarias destinadas al fomento de la cultura preventiva entre los autónomos andaluces, ya que los datos de siniestralidad siguen siendo cuanto menos alarmantes, y que se apueste por la cultura emprendedora en el ámbito educativo de la mano de las entidades más representativas que sabemos de emprendimiento.
Es el momento de tender puentes y evitar la crispación. Cualquier gobierno, en Andalucía o cualquier parte de España, va a tener a su lado a ATA velando por los trabajadores por cuenta propia con la independencia y la lealtad institucional.
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