
ACS ha contratado a Bank of America para pilotar la venta de su división de servicios Clece por unos 700 millones. La compañía sigue así los pasos dados por Ferrovial, Sacyr y OHLA que también realizaron esta desinversión. La operación está aún en su fase inicial, pero en función del interés ACS podría dividir la venta por actividad para así tratar de maximizar el valor, como ya hicieron también algunos de sus rivales. La constructora que preside Florentino Pérez demuestra con ello que fija su crecimiento futuro en el área de concesiones, con Abertis como bastión principal, y energías renovables. Se trata de una estrategia acertada ya que estas actividades ofrecen una mayor rentabilidad que la que se obtiene por el negocio de servicios.