
A las bolsas les empieza a pesar la posibilidad de que la opción de que el Reino Unido abandone la UE sea la ganadora en el próximo referéndum del 23 de junio.
A falta de ocho sesiones bursátiles para la cita británica con las urnas, el Ibex 35 no sólo se ha dejado en la última jornada de la semana el 3,18 por ciento, el mayor batacazo desde el mes de febrero, sino que pierde sus soportes, lo que expone al índice a volver a los mínimos del año en próximos días. Las encuestas sobre el Brexit cada vez están más igualadas y aunque los mercados han estado apostando por la permanencia, la incertidumbre actual sobre el resultado final hace temblar a los inversores y recordarles las adversas consecuencias que tendría para la economía de la isla y europea la salida de los británicos. Ayer mismo, un sondeo de Bloomberg daba un 42 por ciento de posibilidades al Brexit y un 43 por ciento a la permanencia en la UE, con un 15 por ciento de indecisos que serán los que inclinen la balanza. Con la confusa campaña del partido laborista, que provoca que casi la mitad de sus votantes ignore que está a favor de la permanencia, no se espera que la incógnita sobre el resultado se despeje antes de la consulta. Para rematar el pesimismo de los mer- cados ayer, los valores bancarios han acusado el constante deslizamiento de los tipos de interés a la baja, a lo que hay que añadir las dudas de las bolsas sobre la decisión de la Fed en tipos de interés, también en este mes. En este contexto, y sin olvidarnos de las elecciones del próximo 26 de junio en España, toca volver a un escenario inestable para las bolsas, en el que lo más prudente es bajar la exposición, ante la amenaza de que el Ibex retroceda un 8 por ciento adicional.