
Los tambores de guerra que suenan desde Ucrania por los escasos avances diplomáticos hicieron que la volatilidad volviera a apoderarse de los mercados en la sesión de ayer. Estas caídas llevan a que las pérdidas anuales superen ya el 5% en el EuroStoxx 50, hasta situarlo en los 4.064 puntos.
Esta cifra coloca al principal indicador europeo muy cerca de los 4.000 puntos. Perder ese nivel abre la puerta a un escenario correctivo que podría dar lugar a caídas adicionales del 10% hasta los 3.600 puntos. Solo una importante mejoría del conflicto de Rusia con la OTAN por Ucrania permitirá al EuroStoxx conservar este soporte fundamental que, para los expertos, es la clave para augurar un mejor desempeño de la bolsa europea en este convulso 2022.