EEUU combate la crisis con un nivel de gasto público inédito, 8,9 billones, superior al desembolso total de las guerras que disputó desde 1914.
No es casual que ahora, con su PIB en vías de crecer casi un 7% según el FMI, la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, hable de alzas de tipos. Aunque luego se retractó, Yellen señaló un obvio riesgo de recalentamiento ante el que la Fed tendrá que reaccionar. No es un fenómeno limitado a EEUU. En la UE, el estímulo fiscal es mucho menor pero sufre repuntes de la inflación por factores como el encarecimiento de las materias primas. Sin duda, el BCE no subirá tipos, pero bastaría con que reduzca sus compras de activos para provocar una convulsión que países tan endeudados como España notarían en sus costes de financiación.