
Brasil lanza el concurso más importante de los últimos años relacionado con autopistas. La participación de Abertis en la puja, a través de su filial Arteris, es más que probable por varios motivos de peso. En primer lugar, la empresa tiene ante sí una oportunidad clave para no sólo mantener su presencia en su cuarto mayor mercado, ya que se relicitan las licencias de dos autopistas que gestionó hasta hace pocos meses.
Además, están en juego nuevos proyectos de ampliación y gestión, que garantizan carga de trabajo durante 30 años. Pero todavía más importante es la ineludible necesidad que tiene Abertis de ganar proyectos tras dos años de parálisis por las pugnas entre sus dueños, ACS y Atlantia. Además, los apuros han crecido desde el momento en que Atlantia se enfrenta en su país de origen, Italia, a la rescisión de contratos decretada por el Gobierno.
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