Corea del Sur ha decidido dar un gran paso en términos de movilidad, apostando fuerte por el combustible de hidrógeno. La propuesta, creada por Kohygen de la mano de Hyundai, tiene como principal objetivo eliminar opciones contaminantes como el diésel y la gasolina y aunque pretende ser una alternativa a los híbridos y eléctricos, también podría acabar siendo su principal competencia.
Este nuevo proyecto se trata de la Estación de Repostaje de Hidrógeno de Ulsan Myeongchon, que se convertirá en la decimoséptima de la ciudad surcoreana, aunque también la más grande del país. Además, la composición del sistema de tuberías, de 10,5 km, que va desde Yeocheon, Nam-gu, hasta Hyundai Motor Hyomun, aporta también una eficiencia y autonomía superior frente a la carga de coches eléctricos.
Esta hidrogenera tiene capacidad suficiente para recargar hasta 1.440 coches o 360 camiones y autobuses, mientras funciona las 24 horas del día. También hay que destacar su presión de 95 MPa (megapascales), que permite dispensar hasta 300 kg por hora. Esto significa que puede surtir hasta tres camiones de forma simultánea.
La inversión de este proyecto ha sido de 8.000 millones de wones, unos 5 millones de euros al cambio, y ha se ha llevado a cabo entre el Ministerio de Medio Ambiente y la inversión privada que ha querido sumarse a la iniciativa.
Esta apuesta forma parte de la hoja de ruta de hidrógeno coreana, que busca alcanzar las 450 hidrogeneras y los 200.000 vehículos de hidrógeno circulando para 2025, frente a los 72 puntos de recarga y aproximadamente 9.500 coches que tenían en 2020.
Los coches de hidrógeno en España
El pasado 2024 se matricularon en España 62 vehículos de pila de hidrógeno, cifra que supone un incremento del 244% respecto al año anterior, según datos de ANFAC. Este dato parece lógico si tenemos en cuenta que sólo se comercializan dos coches de estas características en nuestro país: el Hyundai Nexo y el Toyota Mirai.
Otro gran problema de esta tecnología en nuestro país es la cantidad de hidrogeneras que existen. Actualmente, sólo disponemos de cuatro, y ninguna de ellas aún operativa al público, cantidad lejana a lo que propone el Ministerio de Transición Ecológica, con 150 para 2030.
Por otro lado, si comparamos el coste de repostaje de un coche de pila de hidrógeno frente al de una recarga de un vehículo eléctrico vemos que son muy similares, ya que el precio de 100 km del primero sería de aproximadamente 5,85 euros frente a los 5,10 de la carga rápida del segundo, aunque en caso de hacerla en ultrarrápida este aumentaría hasta los 13,40 euros.
Sin embargo, la verdadera ventaja llega cuando hablamos del tiempo de espera con cada repostaje. El los vehículos de pila de hidrógeno el tiempo máximo es de 5 minutos frente a la hora, aproximadamente, que tienes que pasar para cargar un eléctrico hasta el 100%.
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