La marca china DFSK pone a la venta un SUV de 7 plazas que se comercializa con versión híbrida enchufable, denominado E5, y con variante de gasolina, el DFSK 600. Dos nombres diferentes para un mismo modelo que llega ya a los concesionarios con muy buen precio. Nos ponemos a los mandos del CERO emisiones.
La marca china DFSK (pertenece al Grupo Seres, el mayor fabricante del oeste de China) inicia la venta de un nuevo SUV de 7 plazas de 4,7 metros, de carácter muy familiar, que se ofrece con dos versiones diferentes. Una híbrida enchufable, el DFSK E5, y una de gasolina, el DFSK 600. Aunque se trata del mismo coche, además de por su tecnología, existen diferencias de diseño entre ambas variantes, centradas sobre todo en el frontal. El E5 luce una parrilla en plateado, mientras que la del 600 es de corte más deportivo y en color negro. También es diferente el logo, que en el E5 es cuadrado con nueve círculos que forman una E (que se ilumina), y en el 600 es el nombre de la marca (DFSK). Las ópticas frontales en el E5 llevan un embellecedor azul en su zona exterior para mostrar su condición de híbrido eléctrico, y en materia de llantas, en el E5 son de 19 pulgadas, y en el 600, de 18.
En su equipamiento exterior cuenta con espejos retrovisores abatibles y con ajuste eléctrico, faros LED de encendido automático, techo panorámico, portón del maletero con accionamiento eléctrico y rieles de techo.

La capacidad de maletero es común para ambas versiones, gasolina e híbrida enchufable: 465 litros con las 7 plazas, 1.120, con cinco asientos y 1.432 con todos los respaldos abatidos.

Un SUV con buen precio
Durante la presentación nos pusimos a los mandos de la versión E5, el modelo híbrido enchufable, que será el de mayor demanda (70% para el E5 y 30% para el 600, según las previsiones de la marca).
Lo primero, comentar su precio. El modelo parte de 35.499 euros, lo que le convierte en el SUV híbrido enchufable de 7 plazas más barato del mercado, por delante de los Peugeot 5008 (desde 46.160 euros), Hyundai Sante Fe (desde 56.470 euros) o Kia Sorento (desde 57.900 euros). Esta cifra puede bajar hasta los 25.999 euros si la compra, además de financiarla, nos acogemos al Plan Moves con achatarramiento. DFSK ofrece para este modelo una promoción de lanzamiento para las primeras 100 unidades vendidas: se amplía sin coste la garantía del vehículo dos años más, por lo que los 6 de serie aumentan hasta los 8.
Si hablamos de la versión de gasolina, el 600, el modelo parte de 28.499 euros en su acabado Luxury, donde la única opción es la pintura metalizada (520 euros). Este precio se puede reducir hasta los 25.499 euros si se financia la compra. Además, las primeras 100 unidades que se matriculen podrán realizar 3 operaciones de mantenimiento completamente gratis (promoción válida hasta el 31 de octubre).
Interior refinado
El interior nos ha sorprendido (es común para E5 y 600). Es elegante y acogedor y está bien terminado. Asientos cómodos y tapizados en cuero Nappa y el del conductor dispone de ajuste eléctrico regulable en 6 posiciones con calefacción y ventilación. El del copiloto cuenta con ajuste eléctrico en 4 posiciones. Delante de nosotros se ubica una pantalla para la instrumentación de 7 pulgadas y la del centro (ambas van unidas) es de 12,3 pulgadas. Llega con hasta 12 altavoces, conectividad bluetooth, USB y Android/Car Play, cargador inalámbrico de móvil o climatizador. Ofrece también un sistema de entrada y arranque sin llave.

La segunda fila es espaciosa y cuenta con tres asientos individuales y desplazables, donde se ubican dos anclajes Isofix en las plazas laterales. Para acceder a la tercera fila (2 asientos) hay que utilizar la palanca del lateral del asiento de la segunda fila, abatir el respaldo y desplazar la butaca.

7 plazas con etiqueta CERO
El híbrido enchufable (etiqueta CERO) DFSK E5 equipa un motor 1.5 gasolina con 102 CV de potencia y otro eléctrico de 176 CV. La potencia máxima conjunta total es de 217 CV. La batería tiene una capacidad de 17,5 kW y puede recargarse en corriente alterna a una potencia máxima de 6,6 kW, por lo que su tiempo de recarga completa es de unas 4 horas. La autonomía eléctrica homologada es de hasta 87 kilómetros. Dispone de la función V2L, es decir, puede alimentar dispositivos externos que funcionen a una potencia máxima de 3,3 kW.
En carretera el coche se mueve muy bien y se siente ligero. Su peso es relativamente bajo, de 1820 kilos, a diferencia por ejemplo del 5008 PHEV de Peugeot (2123 kg) o del Hyundai Santa Fe, con sus 2165 kilos y el coche empuja con fuerza cuando se le pide (el SUV anuncia una aceleración de 0 a 100 km/h en 7,5 segundos y una velocidad máxima de 185 km/h). La suspensión es cómoda, aunque algo blanda. Poca fue la distancia (67 km) que recorrimos con este PHEV, pero el consumo final que registró el ordenador de abordo fue de 5,3 l/100 km.
Para gestionar la energía durante los recorridos, el DFSK híbrido enchufable cuenta con un mando (EV/HV) situado en la consola central para seleccionar los modos EV ( prioriza la conducción eléctrica), HEV (da prioridad al motor de gasolina, que recibe, de forma puntual, ayuda del motor eléctrico) y EV MAX (maximiza la conducción solo eléctrica, aunque con una potencia limitada. Para ello hay que pulsar durante 3 segundos en el mando hasta que aparezca la luz azul indicadora "EV" en el panel de instrumentos).
También en la consola central contamos con un pulsador (Drive Mode) para elegir los modos de conducción: Eco, Normal, Sport (cuando queremos disponer de la máxima potencia disponible), y modo Nieve, que limita la entrega de par y potencia. Decir que la diferencia entre ellos es muy leve.
Por su parte, la versión de gasolina DFSK 600 (etiqueta C) cuenta con una mecánica 1.5 TGDI de cuatro cilindros con potencia máxima de 184 CV, asociada a una caja de cambios automática con convertidor de par de 6 relaciones. Anuncia un 0 a 100 km/h en 10,9 segundos y la velocidad máxima, como en el E5, es de 185 km/h.