Györ (Hungría)
La fábrica de Audi en Györ (Hungría) arrancó este viernes de manera oficial con la fabricación del Cupra Terramar, el último modelo de la marca premium de Seat. El automóvil, presentado a comienzos de mes en Barcelona, debe convertirse en uno de los coches más importantes de la enseña y la previsión, siempre según reaccione la demanda, es que su producción ronde las 55.000 unidades anuales una vez estabilizada la curva de lanzamiento habitual.
El director de la planta, László Juhász, explicó a elEconomista.es que la previsión es que el centro esté destinado "dos tercios al Audi Q3 –el único modelo presente hasta la fecha- y un tercio a Cupra". Con una producción anual de 170.000 vehículos, la ratio es de 56.600 coches. El dirigente matizó, eso sí, que la instalación tiene la capacidad para flexibilizar la actividad, por lo que las cifras podrían subir o bajar según el éxito del automóvil.
"Por el momento hemos empezado con 100 coches diarios (la producción es de 770 vehículos por jornada), la semana que viene alcanzaremos los 115 coches al día -se traba en tres turnos- y el plan es subir de manera paulatina", señaló.
Ya desde el primer momento, Seat señaló el Cupra Terramar como un modelo que debía impulsar tanto la rentabilidad como los volúmenes de Cupra con el objetivo de llegar a las 500.000 unidades vendidas al año. Y por ello la firma se enfoca en seducir a nuevos consumidores, que quizás busquen vehículos más grandes y sean de mayor edad que los alcanzados hasta ahora. "Debe ser un coche importante en volumen, aunque no llegue al nivel del Cupra Formentor", añadió en la World Premiere el presidente, Wayne Griffiths.
El vehículo se ensamblará en la planta que Audi tiene en Györ y que se trata del mayor centro de fabricación de motores del mundo. Así, la relación entre ambas enseñas se estrecha por el lado inverso al que había funcionado hasta ahora. Si hasta ahora Martorell había sacado a la carretera casi 800.000 Audi Q3 entre 2011 y 2017 y unos 400.000 Audi A1 desde 2018 a la actualidad, ahora será una instalación de la firma alemana la que produzca para Seat.
El propio Griffiths trabajó para Audi durante más de 20 años y quiso destacar las sinergias y similitudes entre las dos marcas durante el acto. "Trabajar en Cupra hoy tiene muchos paralelismos con hacerlo en Audi en los años 90, con una marca que está entrando en el segmento premium", comparó. "Hoy no solo aumentamos nuestra gama de productos, ayudamos a nuestra marca a crecer", abundó.
"Este proyecto del Cupra Terramar es un claro ejemplo de cómo unir fuerzas nos beneficia a todos, nos hace más competitivos y sienta las bases para futuras colaboraciones", añadió Markus Haupt, vicepresidente de producción y logística del fabricante.
El vehículo no saldrá con una versión puramente eléctrica, algo que ya se dijo en 2022. Tendrá tres tipos de motorizaciones, una puramente de gasolina y dos hibridaciones diferentes. A nivel técnico, las dos motorizaciones de gasolina ofrecerán una potencia de 204 caballos y 265 caballos. La propuesta mild hybrid es de 150 caballos y las híbridas enchufables de 204 caballos y 272 caballos y una autonomía eléctrica de 100 kilómetros.
Con el nuevo modelo, Cupra da por terminados los lanzamientos de 2024. Quedará en 2025 la presentación del Cupra Raval, producido en Martorell bajo un paraguas de 10.000 millones de inversión.