
El anuncio de Ford de que podría despedir con su nuevo ERE a 1.622 trabajadores en la factoría de Almussafes (Valencia), un tercio de la plantilla actual, parece que ha causado el impacto esperado en las Administraciones Públicas y empiezan a moverse los contactos para reducir ese abultado número inicial con otras fórmulas.
Así se desprende de la reunión de la comisión negociadora que se ha celebrado esta mañana en la planta, tras la que los representantes de los trabajadores consideran que hay avances, ya que tanto la empresa como las autoridades están estudiando la viabilidad de una solución temporal para los 996 trabajadores que Ford estima que tendrá que recuperar en 2027, con la fabricación de un nuevo modelo híbrido en la planta.
La propuesta inicial era aplicarles un despido objetivo e incluirlos en una bolsa de trabajo a la que el fabricante acudiría para volver a contratarlos dentro de tres años. Desde hace meses, tanto desde las empresas del sector como desde UGT, el sindicato mayoritario en Almussafes, y la propia Generalitat Valenciana, se ha instado al Ministerio de Industria a que activase el mecanismo RED. Una fórmula que permite suspender contratos y expedientes temporales con condiciones especiales para sectores en reconversión o crisis.
Según explican desde UGT, en los próximos días se intensificarán los contactos y espera que "la negociación vaya avanzando en la línea adecuada". Aunque sin concretar demasiado cuales son las propuestas que están sobre la mesa, apunta a un nuevo expediente temporal ERTE, como el rotatorio que se ha propuesto desde los trabajadores, el ya comentado mecanismo RED o una solución similar.
Desde el sindicato reconocen que las acciones para llevarlo adelante "necesitarán tiempo para ponerlas en marcha", pero consideran que "ganar tiempo no debe suponer un problema", algo que contrasta con el hecho de que la negociación del ERE tiene unos plazos muy concretos.
Sin debate para el resto de salidas
Respecto a los otros 626 puestos incluidos en el ERE que Ford considera excedente de mano de obra estructural, el sindicato considera que "no debe haber demasiado debate sobre las condiciones finales a pactar", y recuerda que en los tres ERE anteriores de la planta el propio sindicato en solitario fue quien firmó las condiciones con Ford.
La compañía ya señaló en su anterior encuentro esta semana que su intención es acordar "una solución de transición" para ese millar de empleos para los que ahora mismo considera que no hay carga de trabajo en las líneas de montaje de la factoría española, que emplea a cerca de 4.800 trabajadores.
La planta valenciana actualmente fabrica únicamente el modelo Kuga, después de haber dejado de producir otros cuatro modelos en los últimos años. El final del último, la furgoneta Transit Connect, el pasado abril es el motivo que ha precipitado la necesidad de la fábrica de reducir su plantilla a la producción actual.