La borrasca Celia llega a España en esta última semana del invierno y afectará al país durante los próximos días. No será como Filomena, pero sí traerá consigo lluvia con barro, fuertes vientos y nieve en algunos puntos.
Según explican desde eltiempo.es, la lluvia puede dejar más de 80 litros por metro cuadrado, "como es el caso en algunas zonas de la costa Mediterránea y Cantábrica". Además, la nieve también va a cuajar "de manera contundente en muchas zonas de montaña, mientras el viento y las olas serán las protagonistas durante el arranque de la semana en zonas del Mediterráneo norte y norte de Canarias", señalan.
Ante esta previsible situación, conviene conocer algunos consejos para manejar el coche de forma segura ante posibles imprevistos en la calzada, como charcos de agua, fuertes vientos o heladas.
Precaución en la carretera
Por lo general, ante las inclemencias meteorológicas conviene circular a una velocidad más moderada, conocer la ruta previamente, así como la previsión del tiempo, y revisar que el vehículo se encuentra en buenas condiciones. También, es aconsejable llevar el móvil con la batería cargada, para poder comunicarnos en caso de emergencia.
Si eres conductor, lo más probable es que estos días tengas que lidiar con el agua en las carreteras. En estas circunstancia, la Dirección General de Tráfico (DGT) afirma que el riesgo de sufrir un accidente de tráfico aumenta hasta un 70 %, mencionando varios estudios.
"Con el asfalto mojado, la adherencia de los neumáticos es menor y necesitamos más metros para detener nuestro vehículo. Además, las primeras gotas, al mezclarse con el polvo, vuelven la vía superdeslizante", explican desde la entidad.
Por ello, desde Tráfico recomiendan utilizar en todo momento el alumbrado de cruce y aumentar la velocidad del limpiaparabrisas si llueve con intensidad; también, encender la calefacción resulta de utilidad para evitar que los cristales se empañen; y, por norma general, se recomienda reducir la velocidad y ampliar la distancia de seguridad respecto al coche que nos precede.
Al darse lluvias, lo más peligroso es que la calzada se inunde o que se formen grandes charcos. Ahí, se puede producir patinazos o el aquaplaning.
Este efecto se produce cuando la rueda del vehículo no es capaz de evacuar el agua de la carretera por falta de dibujo en el neumático, por falta de presión o por un exceso en la velocidad.
Ante la pérdida del control del vehículo por esta situación, es vital no frenar a fondo ni acelerar, además de sujetar el volante con firmeza. Solo se debe corregir la trayectoria (de forma suave) cuando se perciba que se comienza a recuperar el agarre del coche.
Para evitar el aquaplaning, ayuda examinar el estado de los neumáticos antes de emprender el viaje, ya que si las ranuras de la banda de rodadura están desgastadas será más difícil que evacúen agua.
Consejos similares para las nevadas
Estos mismos consejos casi se pueden aplicar a otra circunstancia igualmente complicada: atravesar una placa de hielo.
Ahí, la adherencia del coche es aún menor y la superficie, más resbaladiza. En esta situación, la DGT recomienda soltar suavemente el acelerador mientras se sostiene con firmeza el volante. Y solo cuando se comience a percibir que se recupera el control del vehículo, accionar suavemente el freno.
Por lo demás, si comienza a nevar en la calzada, es recomendable reducir la velocidad, aumentar la distancia de seguridad y evitar circular por las rodaduras que dejan otros coches, ya que es ahí donde más probabilidades se dan para la formación de hielo.
Las cadenas, del mismo modo, son un aliado fundamental para ganar agarre si la nevada comienza a cuajar sobre la calzada.
Circular con marchas largas ayudará a evitar que las ruedas deslicen y pierdan tracción. También, es importante arrancar en segunda y, rápidamente, cambiar a la cuarta o la quinta marcha (por raro que suene). Y, sobre todo, evitar en la medida de lo posible cambiar de marcha.
EVITA CONDUCIR hasta que la calzada esté libre de #nieve y #hielo. Si pisas una placa de hielo es muy fácil perder el control y sufrir un accidente. Aquí tienes algunas pautas por si te pasa????. Pero lo mejor ????No cojas el coche. #ConducciónResponsable #BorrascaFilomena pic.twitter.com/vqMQLh4tuY
— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) January 10, 2021
"Ten en cuenta que al reducir la marcha, el "freno motor" puede hacernos perder el control del coche, ya que las ruedas empiezan a girar a un ritmo distinto y pierden tracción, así que siempre que se pueda hay que evitarlo o hacerlo de forma muy cuidadosa", explican desde el blog de Norauto.
Y si la nevada ya se ha producido, el mejor consejo que se puede dar es evitar coger el coche en la medida de lo posible.