
El consejero delegado del grupo Stellantis, Carlos Tavares, ha pedido a la Unión Europea que aclare qué tipo de movilidad quiere. Así lo ha explicado en un encuentro con los medios en el marco de la presentación del plan estratégico a largo plazo del grupo francoitaloamericano.
En su opinión, que el Viejo Continente alcance los niveles de matriculación previos a la pandemia depende de cómo se quiere apoyar a la industria del automóvil. El mandamás portugués ha recordado que el año pasado se perdieron en Europa más de 3 millones de unidades comercializadas entre turismos y vehículos comerciales en comparación con 2019, último año previo a la pandemia. Así, las entregas de turismos y vehículos comerciales en la Unión Europea en 2021 se situaron en los 13,7 millones de unidades.
Una cifra baja para Europa que el directivo considera que tiene que estar "entre los 18 y los 20 millones de unidades" comercializadas. Asimismo, Tavares ha dicho que "si la sociedad decide que la libertad de movilidad no es importante, tendremos que ir en otra dirección". De cara al presente ejercicio, Tavares estima que las ventas de turismos y vehículos comerciales crecerán un 3% en tasa interanual.
Por ello, Tavares ha asegurado que el problema real es si Europa quiere proteger la industria automovilística "necesita crear las condiciones para subir este mercado a otro nivel", ya que, de lo contrario, "habrá consecuencias".
Preguntado por si ha hablado con el presidente del Gobierno para implementar una gigafactoría de baterías, Tavares ha explicado que "no he hablado con él de nada". No obstante, el directivo ha comentado que pese a tener anunciadas las gigafactorías de Douvrin (Francia), Kaiserslautern (Alemania) y Térmoli (Italia); y otras dos en Norteamérica, "estamos abiertos a otras oportunidades". Y es que el grupo cuenta en España con un total de 3 fábricas de vehículos (Vigo, Zaragoza y Madrid) y en cada una de ellas produce modelos completamente eléctricos. Así, el año pasado el grupo fruto de la fusión entre PSA y FCA ensambló en estas factorías un total de 901.000 unidades.
En línea con esta situación, Tavares ha dicho que lleva trabajando en el sector de la automoción desde 1981 y que "es increíble a la velocidad que va esto", en relación a la electrificación de la movilidad.
Una electrificación que hace frente a un nuevo muro, como es el precio. Por eso, el directivo portugués ha hecho hincapié en que la mejor forma de manejar la transición es hacerlo a través de las versiones híbridas, ya que de esta manera se protege el acceso a volúmenes significativos de venta. Así, ha detallado que un vehículo de combustión de 12 años de antigüedad tiene unas emisiones medias de CO2 de 170 gramos, mientras que uno nuevo con una hibridación media tiene entre 100 y 110 gramos de CO2.
Por otra parte, el mandamás portugués ha comentado que la invasión por parte de Rusia a Ucrania tendrá un efecto financiero en sus cuentas de resultados "completamente marginal". El directivo aseguró que hay 71 trabajadores del grupo en Ucrania a los cuales están prestando el apoyo necesario. En otro orden de cosas, el directivo ha asegurado que no continuará con el patrocinio al tenista serbio Novak Djokovic, pues la marca Peugeot era patrocinadora del deportista.
Concesionarios
Preguntado por la reestructuración de la red de concesionarios, Tavares ha explicado que estos se llevan a cabo para reducir los costes de distribución "porque hay que financiar la electrificación".
Por ello, Tavares ha recordado que hay que crear un marco de discusión con los concesionarios para tener estas conversaciones, ya que detalló que "la red de concesionarios no es lo que la gente esperaba".
Y es que el grupo ha cancelado los contratos que tenía con su red de concesionarios europeos, debido a los cambios medioambientales y normativos que están impactando en el modelo de distribución de la industria. Así, en el caso de España cancelará los contratos de cuatro de cada diez concesionarios que tiene en España debido a los cambios medioambientales y normativos que están impactando en el modelo de distribución de la industria.
Esta medida afectará a 129 empresas concesionarias se verán obligadas a cesar su actividad, del total de 329 con los que cuenta el consorcio en nuestro país, siendo las redes de FCA (Fiat, Alfa Romeo, Jeep, Lancia, Abarth y Fiat Professional) y Opel las más afectadas, según han explicado en un comunicado las patronales de concesionarios (Faconauto) y distribución (Ganvam).