
Bestinver, la mayor gestora independiente de fondos de inversión española propiedad de Acciona, ha vendido toda su participación en Telepizza, a poco más de una semana de que se celebre la junta general de accionistas de la compañía de restauración en la que se votará la opa de exclusión de bolsa.
La firma presidida por Beltrán de la Lastra se ha deshecho de 2,89 millones de acciones, que representaban el 2,9% de Telepizza, por un valor de mercado de 17,3 millones de euros, según Bloomberg, aceptando de esta forma el precio de seis euros por acción que el promotor de la opa, Tasty Bisco, el brazo inversor del fondo de capital privado KKR y dueña del 56% de los títulos de la firma de restauración, había ofertado a los inversores institucionales presentes en el accionariado.
Este era el precio que Bestinver había rechazado de forma reiterada por considerarlo injusto para los partícipes de sus fondos. Y lo dijo públicamente en la última conferencia anual de inversores celebrada en Madrid hace tres semanas. "No venderemos una acción a seis euros que no tengamos la obligación legal de hacer", aseguró De la Lastra entonces. "El precio ofertado es injusto y hemos defendido el interés de nuestros partícipes", aseveró también Jaime Vázquez, analista senior de la gestora especializado en las empresas de distribución y consumo.
Preguntados por elEconomista sobre las razones de este cambio de criterio, en Bestinver han declinado realizar comentarios y recuerdan que los títulos de Telepizza se han revalorizado un 20% desde que entraron en ellos en abril del año pasado.
En el accionariado quedan otras gestoras españolas, como Ibercaja, Bankia, BBVA o Mediolanum, que deben decidir si acudir a la opa de exclusión o no, pero su porcentaje de participación es más reducido del que poseía Bestinver. De ahí que la venta en bloque de sus acciones no hayan pasado desapercibidas.
Con la salida de la gestora propiedad de Acciona, KKR despeja un poco más el camino para realizar sus planes, aunque se han encontrado con varios problemas durante el proceso. Por ejemplo, debieron de reducir el porcentaje de aceptación de la opa del 75% al 50% para poder hacerse con el control mayoritario de la compañía de restauración y la posición de inversores institucionales como Bestinver había puesto en el escaparate la posibilidad de tener que seguir negociando, a pesar de que la CNMV había advertido que consideraría "inapropiado" cualquier acuerdo al que pudiera llegar la firma de capital riesgo con accionistas para comprarles a un precio superior del ofertado en la opa.