Madrid.
La pugna por la supremacía tecnológica entre China y EEUU ha estado encarnada en los últimos años por nombres como Huawei o Apple, relegando al olvido de los inversores a firmas europeas como Nokia y Ericsson desde que perdieron la carrera del smartphone.
Sin embargo, la decisión de Google de restringir el acceso a la compañía china a las actualizaciones de Android y a sus servicios móviles a partir de mediados de agosto abre, en opinión de los analistas, una oportunidad en estos valores escandinavos, que desde el lunes suben un 6% en el caso de Ericsson y un 3% en el de Nokia.
"China ha estado impulsando su dominio en el desarrollo de tecnología 5G en el mundo a través de Huawei, pero su talón de Aquiles reside en que necesita de los semiconductores y tecnológicas estadounidenses, dependiendo de piezas como procesadores fabricados por Qualcomm e Intel, amplificadores de energía producidos por Skyworks y Quorvo, o los componentes ópticos de Lumentum", señala Sean Darby, director de la estrategia global de renta variable de Jefferies.
Con ZTE –EEUU le prohibió en 2018 hacer negocios hasta 2025 tras descubrir sus relaciones comerciales con Irán y Corea del Norte– y ahora Huawei fuera de juego, Nokia y Ericsson son las compañías mejor posicionadas para hacerse con la mayor parte del pastel. Y es que tras perder la batalla de los móviles ambas compañías reorientaron su modelo negocio hacia el 5G, pero la falta de competitividad frente a las tecnológicas chinas, con precios más baratos, las había dejado en un segundo plano.
"Hay una oportunidad de ventas de 5.000 millones de dólares para los principales competidores de redes de Huawei en caso de que la escalada de los problemas geopolíticos y las preocupaciones de seguridad jueguen un papel importante en las decisiones de compra de equipos", recuerdan desde Bloomberg Intelligence.
Buena prueba de ello es que desde el lunes son los únicos valores del sector, junto a la coreana Samsung –ver información inferior–, que escapan a los números rojos, con subidas entre el 3 y el 6%. Unas alzas que contrastan con las pérdidas de los valores más afectados como las chinas Baidu, Tencent, Xiaomi y la norteamericana Qualcomm, que retroceden entre un 0,7 y un 8%. Apple, por su parte, se deja un 3% y es una de las compañías en el ojo del huracán de la guerra comercial –China es el segundo mercado en el que más iPhone vende– por el temor a que Pekín tome medidas como represalia.
Mejoras de recomendación
En este contexto de guerra comercial los dos operadores europeos han recibido dos recomendaciones de compra frente a la valoración del consenso de mercado que recoge FactSet, para quienes ambas compañías son un mantener. En concreto, los analistas de Bank of America Merrill Lych (BofAML) elevaron este miércoles la recomendación sobre los títulos de Ericsson desde neutral a comprar y actualizaron su precio objetivo a 110 coronas –lo que a precios actuales le otorga un potencial del 15%, frente a la valoración que le otorga el consenso de FactSet, para quien está sobrevalorada–. "Creemos que ambas acciones dan a los inversores una exposición sólida al próximo ciclo de desarrollo 5G", explican los expertos de la entidad americana, para quienes el liderazgo de Ericsson es "cuestión de tiempo".
Nordea también mejoró su consejo sobre la finlandesa el lunes. "Nokia enfrenta un periodo de crecimiento que puede durar varios años mientras la situación competitiva mejore considerablemente debido a los problemas de seguridad de las empresas chinas", apuntan desde la entidad danesa. Además, sus expertos ven las preocupaciones sobre el 5G "exageradas" y esperan una mejora de beneficios para el segundo trimestre, cuando aumentan las entregas.
Las previsiones del consenso son optimistas, y si se cumple lo esperado, las ganancias de Nokia superarán los 2.000 millones de euros el año que viene. En el caso de Ericsson el beneficio se quedará por debajo de los 1.500 millones en 2020.
Este martes el presidente ejecutivo de Nokia, Rajeev Suri, reconoció en la junta general de accionistas que aunque la firma había tardado un poco en poner en funcionamiento la tecnología 5G, están ganando terreno. "Ahora tenemos 37 contratos comerciales 5G, 20 con clientes nombrados que incluyen T-Mobile, AT&T, STC y Telia, y más de la mitad de ellos incluyen elementos de cartera más amplios que nuestros competidores no pueden igualar", aseguró el ejecutivo.