
Durante los últimos años uno de los temas más recurrentes con respecto al sector bancario ha sido la posibilidad de que se produzca una ola de fusiones. En repetidas ocasiones el BCE ha abogado por que se produzcan operaciones transfronterizas. De momento, los analistas ven más probables las operaciones domésticas y explican que las bajas valoraciones a las que cotiza el sector hacen que la posibilidad de fusionarse sea más atractiva.
La banca de la eurozona cotiza a 7,5 veces sus beneficios de los próximos 12 meses, ligeramente por debajo del múltiplo al que se compraba el sector tras el Brexit y un descuento del 32% con respecto a las 10,5 veces a las que se pagaba al arrancar 2018. Además, se compra con un descuento del 40% con respecto a su valor contable. "Acuerdos entre grandes bancos probablemente generarían debates sobre la salud sistémica y las potenciales pérdidas de trabajos. Pero, en los múltiplos actuales, pensamos que el momentum de ganancias que generaría un acuerdo sería demasiado atractivo para dejarlo pasar: un ahorro de costes del 20% dejaría a la banca europea cotizando a 6,3 veces sus beneficios", explican desde UBS.

En los últimos meses se ha especulado con grandes operaciones como una posible fusión entre Commerzbank y Deutsche Bank o incluso una gran operación entre Société Générale y Unicredit. En todo caso, los analistas siguen viendo más probable que las operaciones sean entre entidades del mismo país.
"Vemos espacio para que haya mayor consolidación en los próximos dos años gracias a unos balances más sólidos y una mejor situación macro. No esperamos un aumento de los acuerdos transfronterizos u operaciones de gran tamaño (...). El M&A doméstico ha dominado la actividad reciente y esperamos que este patrón continúe. Los acuerdos dentro del mismo mercado son más fáciles de vender a los accionistas y a los reguladores porque tienen mayores sinergias y unos riesgos de ejecución más bajos", explican los analistas de S&P.
Hay muchas pequeñas entidades
A pesar de que con la crisis el número de grandes entidades se ha reducido sustancialmente, el número de pequeñas entidades sigue siendo excesivamente alto. Según los datos del banco helvético, en Alemania hay 1.613 instituciones de crédito, en Italia 525 y en Francia 416. En el caso de España son 205.
"Los bancos españoles están cotizando con unos descuentos que, por fundamentales, no están justificados", apunta José Ramón Iturriaga, gestor de Abante, quien completa: "Estas distorsiones en valoración no se pueden mantener en el tiempo y son un buen caldo de cultivo para el baile de operaciones corporativas que vamos a ver. Porque en el sector financiero hemos visto una gran concentración de la crisis, pero todavía quedan bastantes operaciones".
Por su parte, Nuria Álvarez, analista de Renta 4, cree que "puede haber margen" para mayores consolidaciones "porque aún hay pequeñas entidades que siguen operando", si bien reconoce que lo lógico es que este proceso se produzca "más adelante". La banca española cotiza con un descuento cercano al 30% frente a su valor contable. Además, su multiplicador de beneficios de cara a los próximos 12 meses se sitúa en las 7,7 veces, ligeramente por encima del múltiplo pagado en la eurozona.