
La fotografía que deja en los mercados de activos 2018 es de lo más desoladora. "Prácticamente no ha habido escapatoria para ningún activo pero es una situación bastante excepcional", ha resumido Joaquín García Huega, director de estrategia global de BBVA AM &Global Weath en la presentación que la gestora ha realizado esta mañana sobre sus perspectivas de 2019.
En ellas la gestora ha hecho hincapié en dos cosas. La primera es que no prevén que en 2019 se vaya a producir una recesión, coincidiendo con la opinión de la mayoría de expertos de mercado; y la segunda es que en un contexto de desaceleración económica como al que nos enfrentamos (pronostica un crecimiento de PIB del 2,4% para EEUU, y del 1,8 % para Europa) lo que volverá a tener impacto en los mercados son más los riesgos geopolíticos que los datos económicos. "Los riesgos políticos no van desaparecer. Hemos entrado en un periodo en el que la política tiene un impacto creciente en el mercado", afirma García Huerga.
Estos riesgos políticos, que BBVA concentra sobre todo en Europa ya que es en esta región donde en 2019 tienen lugar elecciones tan importantes como las del Parlamento europeo, las de Grecia o las autónomicas en España, explican que en la gestora vuelvan a salirse de la opinión del consenso y sigan confiando más en la bolsa estadounidense que en la europea de cara al próximo año. "Hay que medir mucho los riesgos y por eso no estamos más positivos en bolsa europea que en bolsa de EEUU. EEUU nos sigue ofreciendo mejores garantías y a pesar de que parezca que Europa está más barata la diferencia no es tan alta ya que igualando los pesos de los sectores en los índices la diferencia de PER es de 0,7 veces entre Europa y EEUU", afirma el experto.
Eso sí, atendiendo solo a valoraciones, que incide en que no es lo más importante a analizar a la hora de construir unas carteras que insiste en que no deben asumir demasiados riesgos, las mejores expectativas de revalorización están en el Viejo Continente. En concreto, pronostica que el SP500 acabará 2019 con un alza del 4%, frente al 5,7% que estima que suba el Eurostoxx o el 8,9% del Ibex, sin contar dividendos, lo que deja una media para la renta variable en niveles del 6%.
Si el mercado de acciones presenta riesgos, el de renta fija tampoco se salva de cara al próximo año siendo el mayor de ellos los efectos que la retirada de liquidez que están llevando a cabo los bancos centrales tenga en los precios de los bonos. "El crédito presenta una valoraciones más neutrales tras la ampliación de spreads pero no nos compensa en términos de rentabilidad riesgo", afirma García Huerga. No obstante, recuerda que atendiendo a las perspectivas de rentabilidad, el mercado de EEUU ofrece mejores cifras que el europeo, aun para quien que cubra esa inversión a euros.
Así, estima que el TNote de EEUU se moverá en la zona del 3% los próximos doce meses frente al 0,6% que pronostica para el bund, y en crédito prevé rentabilidades del 0,1% para la deuda investment grade de EEUU en euros (a su equivalente europeo le otorga un 0%) y del 0,3% para el high yield cubierto en euros frente al 0,1% del europeo. Previsiones muy modestas pero positivas, a diferencia de lo que ha sucedido este año en el que los inversores de renta fija no han visto otra cosa que ver cómo perdían dinero con sus inversores . "La rentabilidad esperada es positiva pero para que se cumplan tienen que funcionar las bolsas y la renta fija tiene que dejar de restar. Si esto sucede los conservadores sí podrán obtener rentabilidades que igualen o batan a la inflación", apunta.
¿Y la guerra comercial?
La gestora también ha querido dedicar un capítulo de sus previsiones a los efectos que la guerra comercial pueda tener en la economía. En concreto, estima que con su escenario base los efectos de la guerra comercial podrían restar 0,10% en el crecimiento de economía global, 0,60% en la china o 0,20% en la de EEUU. Más preocupante sería el efecto de dicha guerra si se ¡intensifica dicha guerra y se le suma la reacción del mercado. En ese caso, el impacto negativo sería de -0,8% en la economía mundial, y eso son palabras mayores.
Además de analizar qué le depara 2019 a los mercados desarrollados, García Huerga también ha querido explicar que es lo que piensa la gestora con respecto a los emergentes, concretamente a la zona de Latam, para la que espera un crecimiento del 1,8% para 2019. A favor de dichas regiones juega que tanto México como Brasil ya han dejado a tras la incertidumbre electoral aunque ahora lo que cotizará en sus mercados es si acometen o no las reformas estructurales prometidas en el pasado.
En concreto, para México ve más viento de cola positivo que negativo ya que el mercado cotizará al alza la ratificación de sus acuerdos comerciales con EEUU Y Canadá, y los datos económicos del país azteca, muy basados en el alza de consumo. Además, el hecho de que la inflación subyacente se mantenga estable permite pensar en una política acomodaticia por parte del banco de México que es previsible que celebren los inversores. "En México nos gusta más la deuda mexicana que la bolsa porque estamos más cómodos, vemos oportunidades más claras ahí", apunta García Huerga.