
Las gestoras value de tamaño medio se han enfrentado este año al reto de vivir en un entorno de enorme volatilidad que ha puesto a prueba la paciencia de los inversores. Pero la gratificación ha sido comprobar que en octubre muchas de ellas han recibido entradas de dinero, tal y como se puso de manifiesto en la mesa redonda 'Value Investing: dónde están los nuevos nichos de mercado', que se ha celebrado esta mañana en la Bolsa de Madrid organizada por elEconomista. El sábado se publicará la información completa en Ecobolsa.
Y este entorno de volatilidad ha permitido reforzar las posiciones donde los gestores consideran que existe más valor y reforzar otras donde el precio todavía no ha alcanzado el valor estimado.
Entre esas compañías que han sido castigadas por el mercado, Diogo Pimentel, analista de inversiones de Magallanes Value Investors destacó el automovilístico, donde por ejemplo Renault, que ayer sufrió un fuerte batacazo en bolsa, ha sido una de las firmas más castigadas por el pensamiento dominante de que el coche eléctrico va a dominar el mercado en los próximos años. Pero, a juicio de Pimentel, la alianza con Nissan sigue teniendo sentido y es uno de los fabricantes que mejor se ha adaptado al nuevo entorno tecnológico.
Beltrán Paragés, responsable de Desarrollo de Negocio de AzValor, explicó cómo el sector de las materias primas se ha enfrentado en los últimos años a la vuelta que dio el gran ciclo de las materias primas que duró hasta 2010. Empresas relacionadas con el cobre y el uranio han sufrido una reestructuración por un exceso de producción y una desaceleración de la demanda interna. Pero Paragés señaló que los precios tendrán que corregirse en algún momento permitiendo a las firmas que se han reestructurado mostrar de nuevo su valor.
Ricardo Cañete, gestor de fondos de Bestinver, explicó cómo la gestión value no es más que encontrar buenas compañías a precios baratos, un axioma que se puede encontrar aplicar incluso en el sector financiero, en entidades como ING o los bancos italianos. "Los bancos tienen problemas regulatorios y que afrontar cambios tecnológicos, pero el margen financiero puede subir al 30% solo con una subida de tipos de 200 puntos básicos", recalcó.