
Wall Street seguía hoy con pérdidas y hacia la media sesión el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, bajaba un 0,48% tras un informe de empleo en Estados Unidos peor de lo esperado y arrastrado por el petróleo.
Ese índice bajaba a esta hora 88,48 puntos hasta 18.180,02 unidades, el selectivo S&P 500 restaba un 0,60% hasta 2.147,77 enteros y el índice compuesto del mercado Nasdaq perdía un 0,65% hasta 5.272,32 unidades.
Los operadores en el parqué neoyorquino seguían decantándose por las ventas tras la publicación del informe oficial de empleo correspondiente al mes de septiembre, que no superó las expectativas de los analistas.
El Departamento de Trabajo informó antes de la apertura que el índice de desempleo subió una décima ese mes y se situó en el 5% tras la creación de 156.000 nuevos puestos de trabajo, insuficientes para compensar las nuevas incorporaciones.
Esta cifra de 156.000 puestos de trabajo ha sido inferior a los 168.000 nuevos empleos que habían pronosticado los economistas, después del débil dato de agosto, en el que se crearon apenas 151.000 nuevos puestos.
Los inversores también estaban pendientes de los mercados de materias primas, donde el precio del petróleo de Texas perdía la barrera de los 50 dólares en Nueva York y el crudo Brent cotizaba en Londres por debajo de 52 dólares.
Todos los sectores en Wall Street continuaban en rojo, entre los que destacaban el industrial (1,35%), el de materias primas (1%), el energético (0,55%), el tecnológico (0,54%), el financiero (0,52%) o el sanitario (0,44%).
El grupo industrial United Technologies (1,82%) seguía al frente de las pérdidas en el Dow Jones, por delante de Home Depot (1,53%), Walmart (1,38%), DuPont (1,30%), Caterpillar (1,21%), IBM (1,12%) o General Electric (0,99%).
Mientras, al otro lado de la tabla solo avanzaba la aseguradora Travelers (0,77%), Chevron (0,59%), Goldman Sachs (0,37%), Apple (0,04%) y Johnson & Johnson (0,01%).
En otros mercados, el oro retrocedía a 1.255 dólares la onza, la rentabilidad de la deuda pública a diez años subía al 1,740% y el dólar perdía terreno frente al euro, que se cambiaba a 1,1171 dólares.