"Pilas y Baterias, las grandes olvidadas"
MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
A nivel informativo existe una escasa información referente a la toxicidad y peligrosidad de las pilas, acumuladores y baterías de teléfonos móviles. Un alto número de estos residuos especiales no indican en su etiqueta la prohibición de tirarlas a la basura, así como el de su indicación de su reciclado. Se da también una escasa eficacia en la capacidad de recogida y una limitada información sobre los contenedores de recogida selectiva así como a los sistemas de reciclado posteriores.
Los contenedores que existen en la actualidad pasan desapercibidos para la gran mayoría de ciudadanos, ya que son de pequeñas dimensiones y cada Comunidad Autonóma utiliza un modelo de contenedor con colores y volúmenes diferentes, incluso creando mayor confusión, ya que algunas ciudades utilizan soportes publicitarios que incorporan contenedores para pilas poco visibles e incluso contenedores que a la vez también los utilizan para la recogida de otros residuos fitosanitarios.
Los teléfonos móviles/baterías de níquel, cadmio y/o litio se encuentran en la misma situación en la que se encuentran los sistemas de recogida de las pilas, aunque existen algunos distribuidores de telefonía que tienen algún sistema de reciclado con contenedores de difícil identificación.
Desde nuestra opinión la solución a esta realidad, es la de afrontar el problema de la misma forma que han afrontado muchos países del centro de Europa, regulando este sector mediante eco-tasas, ya que en España carecemos de un marco legal que regule la puesta en marcha de un sistema de reciclaje de estos residuos por parte de la industria nacional.
Con las eco-tasas de los fabricantes se puedan financiar campañas de concienciación social y sistemas de recogida y reciclaje eficaces. En otros países como en Bélgica, Alemania, Austria, Holanda, Suiza, Noruega, Países Nórdicos con unas tasas de recogida muy positivas que van del 50% al 75% en la actualidad, cifras mas que envidiables si tenemos en cuenta que actualmente en España solo se recoge sobre un 15% (como media anual) de las pilas que se consumen y de ese 15% tan solo un 5% se recicla, lo que equivale al 1% sobre el total de las pilas consumidas.
De hecho, la nueva normativa establecida por la Unión Europea sobre reciclaje de pilas y acumuladores, aprobada en mayo de este año, establece que los Estados miembros deberán acercar sus índices de recogida al 45% de las pilas usadas en los próximos años. Como ya hemos apuntado antes, solo algunos países de la Unión están en esas cifras, aunque desde luego España no es uno de ellos.
El objetivo de la normativa es que se extienda en toda la Unión Europea, gracias a una nueva legislación que pretende garantizar que las autoridades nacionales de cada país pongan en marcha una serie de planes eficaces de recogida y reciclaje de pilas y baterías, para evitar su incineración o abandono en vertederos, ya que los metales pesaos de una sola pila, si no es tratada correctamente, puede llegar a contaminar hasta 600.000 litros de agua.
Las pilas si no son recicladas, son enterradas en vertederos o quemadas en incineradoras con los demás desechos, liberando metales pesados al medio ambiente y contaminando el agua y al aire por compuestos bioacomulables y sustancias tóxicas. Los metales pesados se incorporan a la cadena alimentaría al ser absorbidos por plantas o peces, que finalmente pueden llegar al ser humano. Los metales pesados, no se pueden eliminar de los tejidos, acumulándose mediante sucesivas absorciones indefinidamente en altas dosis, afectan gravemente a la salud de las personas.
En cambio con la recogida selectiva, las pilas son recicladas triturándose y separadas en diferentes materiales, valorizándose una parte e inertizando el resto, evitando así que puedan contaminar al medio ambiente y a los seres vivos. De ahí la importancia y el énfasis que nuestra asociación pone en hacer un cambio en los hábitos de los ciudadanos, pasando del "usar y tirar" al "usar y reciclar".
Por eso desde nuestra Asociación pusimos en marcha la Campaña Nacional 'Ponte las Pilas y Recíclalas'. Es nuestro cometido fomentar la recogida, ya que el consumo de pilas eléctricas en España se ha duplicado en los últimos años, hasta alcanzar una cifra que supera los 1.000 millones de unidades por año. Una familia de cuatro personas consume aproximadamente 72 pilas al año, lo que supone una media de 18 unidades anuales por persona. Una población de 100.000 habitantes consume anualmente 31.000 Kilos, o lo que es lo mismo, 310 gramos/año aproximadamente por persona.
Son cientos de instalaciones de contenedores para la recogida selectiva de pilas usadas realizadas a nivel nacional en las principales zonas neurálgicas de las poblaciones, Centros Comerciales y Universidades del país. Esta campaña esta abierta a todos aquellos Ayuntamientos u Organismos Públicos y Privados que quieran colaborar con ella.
Como reconocimiento a todas estas instituciones, este año hemos realizado la segunda edición de los 'Premios Pila' durante la Feria Internacional de Urbanismo y Medio Ambiente (TEM TECMA), celebrada desde el 13 al 16 de junio en Madrid. Este año los Galardones han sido otorgados a la Xunta de Galicia y la Generalitat de Catalunya, en la categoría de Comunidades Autónomas; la Mancomunidad de Tudela y el Ayuntamiento de Torrelodones, en la categoría de ayuntamientos; la Universidad de Valencia y la Universidad de Alcalá de Henares, y los centros comerciales de La Vaguada, en Madrid, y centros Carrefour.
Eusebio Gea Suárez.
Secretario General de la Asociación Española de Recogedores de Pilas, Acumuladores y Móviles (AERPAM).
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