
Los mercados comienzan la semana con pérdidas después de que la triple caída bancaria (B&B, Fortis y HRE) constatara el contagio de la crisis a las entidades europeas. Esto contrarresta la aprobación del plan de rescate financiero en EEUU, que todavía deberá pasar por el Senado y la Cámara de Representantes. El Ibex 35 pierde un 3,88%: pánico bancario en Europa e intervencionismo contra la bestia.
"Al Ibex 35 le podría restar cierto recorrido a la baja antes de alcanzar la base del canal bajista a la altura de los 11.000 puntos (Ver gráficos). En el Eurostoxx 50 habrá que ver si es capaz de mantenerse dentro de este canal y formar algo alcista en el mismo mientras que el DAX 30 ya ha cubierto completamente el hueco alcista abierto hace dos semanas. Todos se encuentran cerca de puntos de giro potenciales y de soportes importantes de corto, cuya pérdida habilitaría una profundización de las caídas, presumiblemente importante", señalaba Bolságora en el flash del intradía de Ecotrader.
Los problemas del sector financiero siguen siendo la mayor referencia de unos mercados que parece que sólo tienen ojos para él. Las dudas vuelven tras los problemas de las entidades bancarias europeas, lo que demuestra que la crisis no es exclusivamente estadounidense. Mientras, el euro cae con fuerza frente al dólar y el petróleo también retrocede alrededor del 3%. Destacan las caídas de Santander (SAN.MC), después de anunciar la compra de las oficinas y depósitos de Bradford & Bingley.
"Hay muchos nervios y mucha desconfianza, cada día tenemos nuevas noticias sobre problemas de liquidez o crédito y esto está minando el ánimo de los inversores", dijo un operador a Reuters.
Problemas en la banca
Por un lado, el acuerdo -aparentemente definitivo esta vez- entre demócratas y republicanos para aprobar el plan de rescate del sector financiero debería ser recibido con alegría. De hecho, Wall Street acabó subiendo el viernes por las expectativas de que se alcanzara un acuerdo durante el fin de semana.
Pero este elemento claramente positivo tendrá que enfrentarse a las pésimas noticias referidas a los bancos que no pueden esperar a este plan: tras la quiebra de Washington Mutual y su venta a JP Morgan, ahora llega el turno de Wachovia. Y lo que es más preocupante: la crisis llega a Europa, donde el británico Bradford & Bigley ha sido nacionalizado este fin de semana y donde el gigante de los Países Bajos Fortis ha corrido la misma suerte.
Así será difícil que vayan muy lejos mientras no se frene este aluvión de malas noticias bancarias. Y estas noticias serán las que marcarán una semana más el comportamiento de las bolsas, que la pasada consiguieron rebotar en zona de soporte crítico, pero no fueron capaces de mostrar suficiente fortaleza para una subida sostenible. No olviden, por último, que la prohibición de las posiciones bajistas en el sector financiero en las principales plazas sesga claramente el mercado hacia el lado alcista.
Aparte de las tribulaciones del sector financiero, la semana nos traerá una verdadera avalancha de datos económicos; y no olviden que la pasada terminó con una rebaja del PIB del segundo trimestre en su estimación final hasta el 2,8%. Hoy tendremos gastos e ingresos personales con el índice de precios PCE; el martes, el PMI de Chicago y la confianza del consumidor; el miércoles, el ISM, el gasto en construcción y las ventas de coches; el jueves, los pedidos de fábrica; y el viernes, la estrella de la semana: el paro de septiembre, acompañado por el ISM de servicios.