
Comprar en las caídas... para vender en los rebotes es una máxima bursátil difícil de ignorar tanto por los pequeños inversores como por los más afamados gestores de fondos de inversión. Sin embargo, parece importar bien poco a las compañías de la bolsa española. Las firmas del Ibex 35 han incrementado en 300 millones de euros su posición de autocartera durante el último mes, desde los mínimos de diciembre hasta la actualidad.
Esto supone que, lejos de aprovechar la corrección del mercado para hacerse con sus propias acciones a precios de saldo (del 11 de diciembre a la sesión de este lunes, el Ibex 35 ha protagonizado caídas de un 5,75%), las cotizadas han aumentado en un insignificante 0,05% el volumen de títulos propios en sus manos con respecto a los niveles del mes de noviembre.
La autocartera en conjunto de las 35 firmas que componen el índice asciende hasta los 4.800 millones de euros, lo que representa tan sólo un 0,95% sobre la capitalización total del selectivo (que asciende hasta los 506.000 millones de euros, a cierre de la sesión de este lunes).
Esto quiere decir que las compañías están aprovechando tan sólo una décima parte del margen legal que les permite el mercado -un 10% máximo de autocartera- quizás porque no ven claro entrar en estos momentos, bien a la espera de valoraciones más atractivas, bien por la expectativa de un mercado volátil.
Y aún así, la tenencia de títulos propios se ha incrementado significativamente durante los tres últimos años desde el mínimo marcado en 2013, en los 1.213 millones de euros, según datos reportados por Bolsas y Mercados (BME), una cifra muy similar a la registrada en plena crisis financiera de Lehman Brothers en el año 2007.
Más compras que ventas
De la decena de compañías del Ibex 35 que sucintamente realizaron movimientos de autocartera durante la última gran corrección que afecta a las bolsas, seis de ellas lo hicieron vía compras para aumentar su porcentaje de títulos propios (Iberdrola, Sacyr, Indra, ACS, Banco Santander y Gamesa), mientras que las cuatro restantes (Ferrovial, Banco Sabadell, Banco Popular y Acciona) optaron por las ventas. En ambos casos, hablamos de cantidades prácticamente irrisorias con la sola excepción de la empresa presidida por Ignacio Sánchez Galán.
"Iberdrola lleva a cabo una programa de recompra de acciones" para amortizar el pago en scrip (pago en acciones) de su dividendo, recuerda José Lizán, gestor de carteras de Auriga, en lo que es una práctica extendida entre algunas cotizadas españolas, como el caso de Abertis, la mayor autocartera del Ibex, con un porcentaje del 8,25% -ver gráfico- tras la opa lanzada por la firma sobre el 6,5% de su capital, en una operación que cerró en noviembre. El capital social amortizado en la bolsa española ascendía a 217 millones de euros, el doble que el anterior.
El pasado 4 de enero, Iberdrola compró 366 millones de euros en acciones propias, lo que le supuso pasar de un porcentaje del 0,17% de títulos propios hasta el 1,067%. Sacyr lo hizo un día más tarde. Y fue la segunda vez que aumentaba autocartera en el último mes, hasta un porcentaje del 0,9%. Fuentes de la compañía aseguran que ésta ha abierto un periodo de tres meses en el que llevará a cabo pequeñas recompras de acciones en las que empleará una pequeña parte de la liquidez que obtuvo por la venta de Testa, su ya ex filial inmobiliaria, a Merlin Properties.
ACS es la segunda firma que más ha invertido en recomprar acciones. Acudió al mercado el 10 de diciembre para hacerse con 96 millones de euros de títulos y cuenta con la cuarta mayor autocartera del Ibex (un 2,57%). Diez días antes lo hizo el Banco Santander al adquirir otros 80 millones de euros en acciones, para un porcentaje del 0,3% de títulos propios. Indra ha sido la última en acudir al mercado y lo hizo el pasado viernes, por segunda vez. Compró 2,7 millones de euros de sus acciones. En sus manos está el 0,2% de su propio capital.