
La cuenta atrás ya ha comenzado y las minoristas de Estados Unidos se preparan para la temporada de ingresos más importantel de año. Sin embargo, pese a la caída del precio del crudo y la fortaleza del dólar, parece que los estadounidenses no gastarán tanto como lo hicieron el año pasado.
Según los últimos datos de la consultora IHS Global Insight, las ventas de la temporada festiva crecerán en 2015 un 3,5 por ciento con respecto el año pasado, cuando la subida fue de un 4,1 por ciento. Un debilitamiento que vuelve a poner a la mayor economía del mundo creca de los niveles de 2012 y 2013, cuando las ventas navideñas crecieron alrededor de un 2,7 por ciento.
"Muchas tiendas ya han lanzado descuentos de precios y promociones, rebajas que cada año se adelantan más y más hasta rozar con Halloween", reconoce Chris Christopher, director de Economía de Consumo de IHS Global Insight. Christopher apunta que esto ocurre en un momento en que los precios al consumo de bienes y servicios llevan en terreno negativo en su tasa interanual desde el segundo trimestre de 2013. Un dólar más fuerte fomenta la reducción de los precios de los bienes de consumo importados y la caída del precio del petróleo está ayudando a reducir los costes de transporte para la mayoría de los minoristas y mayoristas.
De momento se espera que el impulso acumulado en el gasto de los consumidores se extienda hasta el cuarto trimestre. IHS Global Insight pronostica que el gasto del consumidor ajustado a la inflación crezca un 3,1 por ciento en el cuarto trimestre, una décima por debajo del porcentaje registrado en el tercer trimestre.
En estos momentos, las minoristas de EEUU se enfrentan a una tendencia que lleva manifestándose durante los últimos años pero que en 2015 promete coger aún más fuerza. Las ventas online podrían crecer alrededor de un 11,7 por ciento este año suponiendo cerca de un 14,7 por ciento de las ventas totales, que tocarán los 630.000 millones de dólares. Aproximadamente uno de cada siete dólares de las ventas navideñas se gastará a golpe de click, un hecho que pone de manifiesto como las minorista de "ladrillo y mortero" siguen siendo canibalizadas por las minoristas online.