
Las empresas estadounidenses han emitido en euros 89.000 millones de deuda en lo que llevamos de 2015, lo que significa el mayor nivel desde el año 2007, según datos compilados por Bloomberg. La agencia también asegura que las firmas de Estados Unidos están pidiendo crédito en euros en su nivel más alto desde 2012, para aprovechar las tasas históricamente bajas.
Los bancos centrales son los que han creado un campo de cultivo favorable para que las compañías del país presidido por Obama prefieran a la divisa común para estas operaciones. Y es que, según afirma José Luis Herrera, analista de CMC Markets, "los bajos costes de financiación por parte del Banco Central Europeo son la principal razón de que las compañías de EEUU estén incrementando las emisiones de deuda en euros".
Las medidas de flexibilización cuantitativa propuestas por la entidad presidida por Mario Draghi en los últimos meses -incluido el plan de compra de deuda pública y privada de la zona euro por valor de 60.000 millones de euros al mes, que arrancó en marzo- han provocado que la divisa común se deprecie frente al dólar un 9,5 % en lo que va de año, aunque en marzo, cuando arrancó el QE, la moneda europea llegó a tocar mínimos de 2003 bajo los 1,05 dólares.
Tomás García-Purriños, analista de MoraBanc, indica que "la divergencia de políticas monetarias entre Fed y BCE debería provocar una depreciación paulatina del euro frente al dólar". Algo que encaja en que, mientras que se estima que en Europa se amplíe el QE, la Fed podría incrementar los tipos en 2015.
El BCE puede adquirir cualquier deuda emitida en euros y en grado de inversión. Por ello, "las empresas americanas emiten bonos en euros para que puedan ser susceptibles de compra por parte del BCE", señala Javier Santacruz, economista e investigador de la Universidad de Essex. Además, el experto añade que "es una forma de meterse en la carrera por la política monetaria expansiva y aprovecharse de esa ventaja, sobre todo para los bancos americanos que están acudiendo al mercado europeo". En este sentido, García-Purriños añade que "la depresión de tipos de interés en Europa conlleva una emisión más atractiva de las firmas en euros".
Los más beneficiados
Al considerarse que el dólar se va a fortalecer con la subida de tipos, las firmas estadounidenses tratan de buscar un modo más barato para amortizar sus deudas. Algo que también las está atrayendo al yen debido a las medidas tomadas por el Banco Central de Japón. Así, Procter & Gamble vendió 100.000 millones de deuda denominada en yenes en abril, según destacan desde Bloomberg.
Según un estudio de BNP Paribas, General Electric sería una de las firmas que más ha recurrido a esta técnica. La casa de análisis estima que la compañía emitió 3.100 millones de deuda en euros con distintos plazos de vencimiento el pasado mes de mayo. Apple o McDonald's también se encuentran en la lista con 2.000 millones cada una, siendo la emisión de la tecnológica una de las más recientes. Con emisiones más reducidas también se puede encontrar, 3M, 1.750 millones, Time Warner, 700 millones o Colgate con 500 millones.
"Listos para actuar si es necesario"
Aún así, todas estas cifras podrían incrementarse ya que el BCE ha indicado que analizará en la reunión de diciembre si amplía el 'Quantitative Easing'. Igualmente, en la reunión mantenida el pasado jueves el organismo mantuvo los tipos de interés en el mínimo histórico del 0,055 y Mario Draghi indicó que "estamos listos para actuar si es necesario y estamos abiertos a valorar todo el menú a disposición".