
El brusco repunte que la rentabilidad del bono español a una década acumula desde marzo, de 90 puntos básicos, ya se ha cobrado otra víctima más: los planes de pensiones que invierten en renta fija, que suponen el 24% de todo el dinero que hay en el sistema individual de pensiones (de 64.498 millones de euros a junio, según Inverco). En lo que va de año, las carteras de los planes que invierten en deuda acumulan pérdidas que de media se sitúan en el 0,6%, según Morningstar. Algo que no sucedía desde hace cinco años, cuando los partícipes asumieron retrocesos del 0,8% después de que el rendimiento de la deuda pública española escalase entonces del 3,8 al 5,5% en un solo año.
En un país en el que buena parte de los ahorradores son conservadores, algunos se habrán llevado las manos a la cabeza al comprobar que su plan de pensiones de renta fija, que eligieron precisamente para evitar sustos, acumula pérdidas que, en el peor de los casos, superan incluso el 6% este año -como es el caso del de Bansabadell Pensiones, Banco Gallego Conservador PP- a diferencia de las fuertes ganancias que lograban hasta marzo. ¿Cómo es posible?, se preguntaran muchos. La respuesta está en el alza del bono y en las comisiones.
El interés de la deuda a una década ha pasado de marcar mínimos anuales en marzo, en el 1,14%, a ofrecer ya una rentabilidad del 2,07% en el mercado. Una subida que se explica porque su precio ha caído a medida que los inversores han deshecho posiciones en este activo, lo que ha provocado pérdidas en las carteras de productos como los mixtos, los planes de empresa, los de pensiones e incluso ha obligado también a las empresas a elevar el precio que pagan por financiarse en el mercado -Telefónica e Iberdrola emitieron deuda el lunes a precios más altos-.
Detrás de la escalada se encuentran varias razones: primero fue Grecia y el referéndum, después China y el miedo a que su economía sufra un parón capaz de hacer temblar al resto del mundo y ahora la incertidumbre política a medio plazo. "España sigue ampliando su diferencial riesgo-país frente a otros países de la eurozona en la medida que se incrementa la incertidumbre política. En los siguientes meses podríamos ver una elevada volatilidad en nuestro mercado sólo apta para perfiles afines al riesgo. Conviene tenerlo en cuenta a la hora de construir carteras", explica el equipo de análisis de Bankinter.
Después está el peaje que muchos de estos productos aplica. Fernando Luque, editor senior de Morningstar, asegura que además de la baja rentabilidad que la renta fija ofrece en el entorno actual, otro de los motivos que provoca que el 76% de los planes de renta fija que se venden en España esté en negativo en el año se encuentra en que "las comisiones que cobran muchos de estos productos son altas. Los planes de renta fija cobran, por ejemplo, una media de un 1,2% anual de comisión de gestión. Si añadimos la comisión de depósito superamos el 1,3%. Y lo más grave es que los productos de corto plazo tampoco tienen una comisión mucho más baja", explica.
La cara y la cruz de los planes
Mientras más de tres cuartas partes de los planes está en negativo en el año, una minoría resiste con ganancias medias del 0,64%. Entre ellos se cuelan, por poco, dos de los diez planes de renta fija más grandes de España: Bankia Renta Plus PP, que acumula un patrimonio de 447 millones de euros y sube un 0,17% y Mapfre Renta PP, con 320 millones y un leve alza del 0,04%.
Pero lo cierto es que entre los grandes planes, donde se sitúan cuatro de Vida Caixa, los partícipes de estos productos asumen pérdidas en el año de entre el 0,03 y el 2,18% -éstas últimas corresponden al Plancaixa Ahorro PP-.
Por suerte, la fotografía a largo plazo cambia. Y en la última década, sólo en 2010 los planes de pensiones de renta fija terminaron el año en negativo y en este aún tienen tres meses para remontar lo que va camino de convertirse en el primer año en pérdidas desde entonces. Sin embargo, cuando se mira la evolución de los casi 130 planes de pensiones que se venden en el mercado español, éstos consiguen avances anualizados del 1,87% a diez años. Es menos de lo que ha subido el coste de la vida en el mismo periodo, en el que la inflación ha crecido a tasas anualizadas del 2,3%.
El honor de batir el IPC a diez años vista queda reservado solo para el 31% de estos productos. El que lo consigue con creces es un plan de pensiones de Deutsche Zurich Pensiones, el Deutsche Individual Cupón Premium DB PP, que avanza en este periodo un 4,31%, a pesar de que este año cede un 0,21%.