
¡A las trincheras! A pesar de que el Ibex 35 pudo contener a duras penas la herida de guerra propiciada por China, que durante la sesión llegó a superar el 7% pero que finalmente limitó al 5,01% (su mayor caída en tres años), lo que ha quedado latente es que es la situación económica del gigante asiático y no la de Grecia (ni una hipotética ruptura de la UE) es lo que de verdad preocupa a los mercados. La prueba es que en el último mes, que es cuando empezó la crisis de China, ésta ha provocado un crash en las bolsas que, en el caso del Ibex, que ha cerrado en los 9.756,6 puntos, alcanza ya el 16%. No se veía un descenso tal calibre en tan poco tiempo (un mes) desde junio de 2012.
Su trigésima mayor caída
El descenso sufrido en esta última jornada ha sido el trigésimo más fuerte de la historia del Ibex y supuso la perdida de 29.500 millones de capitalización. Así, con su suelo en los mínimos intradía de octubre, los 9.370 puntos, todavía tiene margen para caer otro 4%.
"En este entorno es normal que pueda formarse un rebote y el mercado intente sentar las bases de un suelo, pero mucho nos tememos que una eventual reacción al alza en próximas sesiones puede ser vulnerable, lo que técnicamente se conoce como rebote del gato muerto", explica Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader. Es decir, un rebote frágil tras el cual las ventas podrían volver a imponerse. Repuntes concretos aparte, mientras no se consolide un suelo fiable a corto plazo el escenario más probable es que los principales índices europeos continúen su viaje hacia mínimos. Lo que implicaría caídas adicionales desde los niveles actuales del 10% en el caso del EuroStoxx 50 y superiores al 15% en el Dax, el Cac o el Ftse Mib (ver gráfico).
En este escenario, "aprovecharíamos para cerrar las estrategias que a corto han perdido soportes que consideramos clave o que ya no presentan buenas ecuaciones rentabilidad riesgo", añade Cabrero. De ahí que en elMonitor, la estrategia de elEconomista que da seguimiento a una cartera de diez ideas internacionales, saltasen ayer siete stops o que Ecotrader bajase la exposición a bolsa de su cartera modelo en 15 puntos porcentuales, hasta el 27%. El objetivo es preservar el capital para poder disparar llegado el momento.
Y es que, aunque el selectivo como muchas de sus integrantes han perdido su momento alcista por técnico, la ecuación rentabilidad-riesgo es más atractiva que hace un mes. Hasta alcanzar los máximos de las últimas 52 semanas, el Ibex tiene un recorrido del 22%.
Con las últimas caídas (Alemania se une a los índices que están en negativo en el año al ceder un 1,6% y que lidera el Ftse 100, al perder un 10%), los principales parqués europeos destapan potencial alcista a doce meses. El que más, el portugués, que a los niveles actuales tiene un recorrido del 40% y el alemán, del 28%, según Bloomberg.
Rentabilidad del bono español
Salir al mercado en busca de financiación después de que el Ibex 35 registrase su peor sesión de los últimos tres años quizás no sea el escenario más idílico, sobre todo cuando el mercado de deuda no es ajeno a lo que sucede en el de renta variable.
Por tercer día consecutivo, las ventas volvieron a hacer acto de presencia en la deuda (más pendiente de Grecia) y el interés del bono español a diez años volvió a superar el 2 por ciento (lejos de su mínimo anual, del 1,14%). Sin embargo, el calendario del Tesoro ya había fijado de antemano una cita con los inversores hoy con la que tratará de echar hasta 4.000 millones de euros más a su 'hucha'. Lo hará con una emisión de letras a 3 y 9 meses, que no emitía desde el 21 de julio. Entonces colocó letras a 3 meses a tipos negativos, mientras que por el 'papel' a 9 meses pagó un 0,02%.