Ayer las principales bolsas a uno y otro lado del Atlántico invirtieron papeles. Si en las últimas jornadas se habían visto avances en el Viejo Continente y atonía en Wall Street, en la pasada sesión fueron los índices estadounidenses los que se anotaron ganancias mientras que en Europa la renta variable retrocedió posiciones. La Fed reflejó disparidad de opiniones sobre el momento idóneo para subir los tipos de interés.
Los miembros de la Reserva Federal estadounidense siguen discrepando, tal y como se vio en las actas de la última reunión publicadas ayer. Mientras algunos consideran que la situación económica del país ya es suficientemente buena como para incrementar los tipos de interés, otros ven los datos de empleo del pasado viernes, junto con el descenso del precio de la energía, lastran la recuperación como para no subir los tipos antes de lo adecuado.
Tras conocerse esta diferencia en el seno de la institución estadounidense, las bolsas de EEUU se revalorizaron, con un avance del 0,15% para el Dow Jones industrial, del 0,22% para el S&P 500 y del 0,83% para el Nasdaq tecnológico.
Mientras, en Europa se registraron caídas generalizadas en una sesión de corte consolidativo, ya que ha servido para corregir parte del avance del día anterior. Todavía no se ve un deterioro alcista por agotamiento comprador, pero hayq que mantenerse atentos. "Hasta aquí consideramos que todo encaja con un escenario de continuidad alcista, pero si las ventas siguen presionando a los índices europeos en próximas sesiones y esto provoca el cierre de los huecos al alza, entonces habría que hablar de un deterioro alcista", advierten los analistas de Ecotrader.
En el caso del Ibex 35, para que se vean amenazadas las posibilidades de seguir viendo mayores alzas es preciso que pierda al cierre del viernes soportes que presenta en los 11.634 puntos, señalan estos expertos.