
La última jornada bursátil del año en el Viejo Continente ha estado definida por la tranquilidad. Finalmente, los alcistas han logrado imponerse. El selectivo de la bolsa española ha terminado la jornada con un alza del 0,92%, hasta los 8.566,3 puntos, lo que supone una pérdida anual superior al 13,11%, la quinta mayor de la historia del indicador.
El Ibex 35 se ha movido hoy entre un máximo de 8.571,7 puntos y un mínimo de 8.485,5. El volumen de negociación ha sido tan sólo de 978 millones de euros.
El selectivo ha sufrido la quinta mayor caída anual, cerca del recorte del 17% que sufrió durante 2010, el año en el que se empezó a cuestionar la viabilidad de las cuentas públicas de España con la rebaja de rating por debajo de la excelencia de la triple A.
En 2008 el desplome derivado de la quiebra de Lehman Brothers propició el mayor descalabro del selectivo, cuando perdió un 39%, mientras que la crisis latinoamericana en 2002 minó al Ibex un 28,11%. El tercer mayor descenso del parqué madrileño se produjo tras el pinchazo de la burbuja tecnológica en 2000, al dejarse un 21,75%.
La evolución del Ibex en 2011 tuvo como protagonista la volatilidad, y así el principal índice de la bolsa española llegó a marcar un máximo de 11.113 puntos en febrero y un mínimo anual de 7.640 puntos el 12 de septiembre.
Las últimas citas del año
La última semana del año finalizará con escasas referencias macroeconómicas en Estados Unidos, donde únicamente se conocerá el índice de gestores de compra de Milwaukee.
Donde destacan los acontecimientos es en Europa, donde se ha publicado el Índice de Precios al Consumo (IPC) de España y se conocerán las ventas al por menor de Alemania.