La bolsa de Nueva York no ha reaccionado después de la publicación de la tasa de paro del mes de agosto y ha cerrado con pérdidas superiores al 2% en todos sus índices. De este modo, el Dow Jones ha perdido el 2,2%, hasta los 11.240 puntos, mientras que en toda la semana se ha dejado el 0,4%. Por su parte, el tecnológico Nasdaq ha cedido hoy el 2,58%, frente al 2,53% que ha bajado el selectivo S&P 500.
El parqué neoyorquino amplió así en la recta final de la jornada los números rojos con los que ya había iniciado el día, afectado por la noticia de que no hubo cambios en la cifra de empleo neto en agosto y, por tanto, en el índice de desempleo, que se mantuvo en el 9,1% ese mes.
La otra noticia que motivó las ventas de la jornada, y que se ha confirmado tras el cierre del mercado, fue la publicación por parte del diario The New York Times de que el Gobierno de EEUU va a demandar por "miles de millones de dólares" a docenas de bancos por haber engañado a los inversores sobre la calidad de los valores respaldados por hipotecas vendidas durante la "burbuja" inmobiliaria.
La banca se desploma
Entre las entidades citadas por el rotativo se encontraban Bank of America (-8,34%), JPMorgan Chase (-4,6%), Goldman Sachs (-4,55%) y Deutsche Bank USA (-6,04%).
Así, todos y cada uno de los componentes del Dow Jones terminaron en terreno negativo, donde además de Bank of America y JPMorgan Chase destacaron las caídas de Hewlett-Packard (-5,18%), el productor de aluminio Alcoa (-3,6%) y el fabricante de maquinaria pesada Caterpillar (-3,58%).
En el mercado Nasdaq, Netflix continuó con su caída al dejarse el 8,64% un día después de conocerse que el canal Starz no renovará el contrato que permitía ver sus contenidos a los clientes del popular videoclub "en casa".
Materias primas y divisas
Los datos de empleo en EEUU también presionaron a la baja la cotización del petróleo de Texas, que bajó el 2,78% para colocarse en 86,45 dólares por barril.
El ánimo vendedor en el parqué neoyorquino provocó que los inversores buscasen valores refugio, por lo que el oro ascendió a 1.876,9 dólares la onza, el dólar ganaba terreno frente a otras monedas como el euro (que se cambiaba por 1,4202 dólares) y la rentabilidad de la deuda pública estadounidense a diez años retrocedía al 1,99%.