Bolsa, mercados y cotizaciones

El cable submarino que exprime un enorme yacimiento de petróleo casi único en su especie en el reino del crudo

  • Con la ayuda de cable y otras modificaciones se podría casi duplicar su producción
  • El cable instalado casi podría cubrir la distancia entre Madrid y Cuenca
  • Este yacimiento cuenta con 31.000 millones de barriles de petróleo en reservas

Arabia Saudí no tiene ni la mayor cantidad de petróleo del mundo (ese honor corresponde a Venezuela) ni es el mayor productor de crudo (EEUU produce mucho más con menos). Sin embargo, cuando se habla de petróleo, todo el mundo piensa en el reino saudí. Arabia Saudí es el reino del 'oro negro'. El crudo corre por las venas (las arenas de su desierto) de ese país, líder de factor del cártel de la OPEP. Arabia Saudí ha construido una de las naciones más ricas del mundo (al menos eso dice el PIB per cápita, otra cosa es cómo está distribuida esta riqueza) gracias a los ingresos por crudo. Este crudo sale en su mayor parte de pozos y yacimientos en el desierto. Sin embargo, la gran apuesta saudí de los últimos tiempos llega de una formación que es casi única en su especie dentro de Arabia Saudí: el yacimiento marino de Zuluf. Riad ha adquirido un enorme cable submarino (con una longitud que podría cubrir el trayecto de Madrid a Cuenca) chino para exprimir al máximo este campo de petróleo. Arabia Saudí sigue invirtiendo para mejorar su producción de petróleo.

El yacimiento de Zuluf fue descubierto en 1965 y está situado aproximadamente a 40 kilómetros de la costa noreste de Arabia Saudí. Aunque no es el mayor yacimiento de crudo del país, es uno de los campos petrolíferos más destacados por su tamaño y características. A diferencia de la mayoría de los yacimientos saudíes, que se encuentran en tierra firme, Zuluf se ubica en aguas poco profundas del Golfo Arábigo, a unos 40 metros de profundidad. Esta característica lo convierte en una excepción dentro de la industria petrolera saudí, predominantemente terrestre. Con reservas probadas que superan los 31.000 millones de barriles de petróleo equivalente, Zuluf se erige como uno de los yacimientos offshore más grandes del mundo. Desde el inicio de su producción en 1973, ha sido una pieza clave en la capacidad exportadora de Arabia Saudita, aportando significativamente al suministro global de crudo.

Mucha tecnología y un cable chino

El desarrollo de Zuluf ha requerido la implementación de tecnologías avanzadas y soluciones innovadoras para superar los desafíos inherentes a la extracción en alta mar. La construcción de plataformas marinas, la instalación de oleoductos submarinos y la adopción de técnicas de perforación especializadas han sido fundamentales para maximizar la eficiencia y seguridad en la explotación del yacimiento. La última novedad llega desde China. La empresa ZTT Submarine Cable & System envió a finales de 2024 un largo cable submarino destinado al proyecto de expansión del campo petrolero de Saudi Aramco en el yacimiento de Zuluf donde se desarrolla este proyecto, ubicado en alta mar frente a Dhahran, Arabia Saudí.

Esta ampliación contempla el desarrollo de una cuarta planta de separación de gas y petróleo (GOSP), además de la instalación de nuevos oleoductos y cables submarinos. Con estas mejoras, la capacidad de producción del yacimiento aumentará desde los 800.000 barriles diarios (bpd) de crudo Arabian Medium hasta los 1,4 millones de barriles diarios (Mbpd) de crudo pesado.

ZTT informó que el 17 de octubre, el proyecto offshore de Zuluf ya había alcanzado un hito crítico con la carga y entrega del cable submarino de 230 kV en Nantong, China, desde donde inició su trayecto hacia el yacimiento frente a Dhahran. Ahora, se estaría poniendo en marcha esta obra y conectando el cable que permitirá el aumento de los flujos de petróleo desde el fondo del mar hasta la superficie. Esto será gracias al cable que permitirá una mayor entrada de energía en las plataformas y plantas que trabajan en el mar extrayendo y tratando el petróleo.

El cable submarino, con una extensión de 154 kilómetros, es una infraestructura clave para el funcionamiento del yacimiento Zuluf, suministrando energía a sus operaciones esenciales. "El cliente ha quedado extremadamente satisfecho con el producto, que ya llegó a su ubicación de despliegue", destacó ZTT. "Este logro establece un nuevo referente en calidad, eficiencia y sostenibilidad dentro de la infraestructura energética offshore".

La revolución del yacimiento de Zuluf

El yacimiento de Zuluf, junto con los campos de Marjan y Safaniya, se considera uno de los mayores (y escasos) yacimientos petroleros offshore de Arabia Saudí. El Departamento de Producción Offshore de Safaniya (SOfPD), que forma parte de Saudi Aramco, ha lanzado múltiples iniciativas para reducir el consumo energético en estas áreas, alineándose con el compromiso de la compañía de alcanzar la neutralidad de emisiones para 2050.

Entre las medidas implementadas en Zuluf, SOfPD ha impulsado la electrificación de las bombas sumergibles eléctricas, una solución para mejorar la eficiencia energética. Además, tras evaluar las turbinas de gas ZG-4, se determinó que eran obsoletas y operaban con baja eficiencia. Como respuesta, se estableció un plan para contratar una empresa externa que suministre generación de energía mediante generadores diésel para garantizar la recuperación de energía en la GOSP de Zuluf. La ampliación de producción en Zuluf permitirá procesar 600.000 bpd de crudo en una instalación centralizada para 2026, consolidando su papel como un pilar estratégico en la producción de crudo de Arabia Saudí.

Recientemente, la empresa italiana Saipem fue contratada para ejecutar los trabajos de ingeniería, adquisición, construcción e instalación (EPCI) en los yacimientos de Zuluf y Safaniya. El proyecto incluye la entrega de tres jackets, cinco módulos de plataforma de producción (PDMs), 22 kilómetros de oleoductos submarinos rígidos de 16 pulgadas de diámetro, 5 kilómetros de oleoductos submarinos flexibles, y 35 kilómetros de cables eléctricos submarinos.

Casi duplicará la producción de petróleo

Aunque es ahora cuando se están viendo estos cambios, fue en 2017 cuando Saudi Aramco anunció el ambicioso plan de expansión para Zuluf, con el objetivo de aumentar su capacidad de producción de 800.000 a 1,4 millones de barriles diarios. La expansión de Zuluf no solo busca fortalecer la posición de Arabia Saudita en el mercado energético global, sino también apoyar la iniciativa Vision 2030 del país, que pretende diversificar la economía y reducir la dependencia del petróleo. Al incrementar la producción offshore, Saudi Aramco demuestra su compromiso con la innovación y la sostenibilidad en la industria energética.

Cabe recordar que Arabia Saudí produce en la actualidad unos 9 millones de barriles de petróleo cada día, pero su capacidad ociosa es la más grande del mundo. Esto quiere decir que si el reino quisiera producir mucho más crudo podría hacerlo casi de un día para otro, pero por ahora prefiere mantener la oferta tensa y que el precio se sostenga cerca de los 80 dólares el barril (vender menos crudo pero más caro). No obstante, esta capacidad adicional saudí se convierte en un 'as en la manga' para amenazar a sus 'colegas' de la OPEP: "Si no queréis mantener los recortes, yo puedo hundir los precios con todo el petróleo ocioso".

Una de las singularidades de Zuluf es su capacidad para producir crudo de tipo Arabian Medium y Arabian Heavy, lo que amplía la gama de productos que Arabia Saudí puede ofrecer a sus clientes internacionales. Esta diversidad en la calidad del crudo extraído permite al país adaptarse a las diferentes demandas del mercado y mantener su competitividad a nivel global.

Además de su importancia económica, Zuluf destaca por las medidas ambientales implementadas en su operación. Saudi Aramco ha adoptado prácticas de gestión ambiental rigurosas para minimizar el impacto de las actividades de extracción en el ecosistema marino del Golfo Arábigo, asegurando la protección de la biodiversidad y la sostenibilidad a largo plazo.

La ubicación offshore de Zuluf, una rara avis en Arabia Saudí, también ha impulsado el desarrollo de infraestructura marítima en la región, incluyendo puertos y rutas de transporte especializadas para el manejo del petróleo extraído. Estas inversiones han generado beneficios económicos adicionales, fomentando el crecimiento de industrias relacionadas y creando oportunidades de empleo en áreas técnicas y logísticas.

A lo largo de las décadas, Zuluf ha demostrado ser un activo estratégico para Arabia Saudí, proporcionando una fuente fiable de ingresos y contribuyendo a la estabilidad del mercado energético global. Su desarrollo y expansión reflejan la capacidad del país para adaptarse a las cambiantes dinámicas de la industria petrolera y su compromiso con la excelencia operativa.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky