
El 2024 no fue el mejor año para las empresas automovilísticas del Viejo Continente, ante la debilidad de su negocio en China. El sector cerró el pasado año en terreno negativo, y casi todas sus firmas se anotaron descensos significativos en el cómputo anual, excepto Ferrari y Renault, que lograron avanzar en un momentum complicado para las ventas del sector. Las perspectivas para este año tampoco son muy alentadoras, ya que los analistas esperan que continúen las caídas en los beneficios que reporten estas empresas a lo largo de este año, pero Renault empieza el año con buen pie. La empresa tiene el único consejo de compra de todas sus homólogas, según muestra el algoritmo que genera este medio con el consenso de expertos que congrega FactSet.
De esta manera, Renault arranca el año con su mejor recomendación desde septiembre del año 2018, mientras el resto de empresas automotrices europeas levantan recomendaciones de mantener. Ni siquiera Mercedes Benz y Porsche preservan el consejo de compra, a pesar de que habían logrado resistir con esta recomendación hasta principios del mes de diciembre.
Una de las últimas entidades de análisis que han revisado a la firma de automóviles es Barclays, tras conocer la noticia de que Nissan y Honda habían empezado a discutir una posible fusión, lo que llevaría a convertirlas en el tercer mayor fabricante de automóviles del mundo. Desde Barclays destacan que "Renault es un gran accionista de Nissan (posee un 36% de participación en la actualidad), por lo que una Nissan más fuerte sería positiva para la empresa, tanto en términos de impacto financiero directo en los resultados (incluidas las ventas a socios, y el dividendo recibido de Nissan)".
Además, señalan que favorecería a la francesa en "términos de valor de la participación, que aumentó en 655 millones de euros de la noche a la mañana" por la revalorización de las acciones de la nipona en noviembre tras los titulares de fusión. Desde Barclays aseguran que "esto es especialmente significativo, dado que Renault se ha comprometido a reducir su participación al 15%, destinando los ingresos de la venta a reforzar el balance de su empresa y, por extensión, la rentabilidad para el accionista". Desde la firma concluyen que "una fusión Honda-Nissan ofrecería potencialmente a Renault una oportunidad de salida natural para acelerar la venta de su (exceso de) participación en Nissan".
Y pesar de que "el mercado de masas de la Unión Europea sigue siendo tibio", desde Barclays estiman que Renault está "ganando cuota con su excelente cartera de productos de las marcas Renault y Dacia, desde nuestro punto de vista". Por lo tanto, han aumentado en un 17% el precio objetivo que le dan a las acciones de la compañía hasta los 52,5 euros, lo que supone un potencial del 12,2% por delante.
Desde JP Morgan explican que su apuesta por la automotriz "gira en torno al margen básico de Renault Auto, la fuerte cadencia de lanzamiento de productos en los próximos tres años, que impulsará la combinación de productos y su poder de fijación de precios, la capacidad de cooperar con Nissan; y la generación de flujo de caja libre industrial". Y es que, "independientemente de una posible fusión de Nissan con otros socios", consideran que no hay cambios, ya que "la empresa se beneficia claramente de su sólida cartera de productos, una fuerte generación de caja libre y una creciente posición de tesorería neta", agregan.
Porsche tiene la mejor valoración
Con respecto a la valoración que tienen los expertos de esta compañía, el consenso de analistas considera que la automovilística francesa tiene un 17% de potencial por recorrer en los próximos meses, que es igual al promedio de las empresas de este sector. En 2024, Renault llegó a avanzar hasta un 28% en su cotización bursátil, y ahora esperan que avance hasta los 55,84 euros, frente al entorno de los 47,8 euros en los que cotiza.
Aunque esta firma tiene la mejor recomendación de todas las automovilísticas, los analistas esperan que sus homólogas, Porsche y Volkswagen, recorran más de un 25% en el parqué a lo largo de este 2025 después de las caídas que se anotaron el año pasado. La firma de lujo europeo llegó a descender un 21,5% en bolsa a lo largo del año, ya que en los primeros nueve meses del ejercicio 2024 se desplomaron un 30% con respecto a las ganancias del año 2023. Ahora los expertos esperan que Porsche alcance los 80 euros, lo que supone un recorrido del 29% en los próximos meses desde los 61 euros en los que cotiza. Mientras, la alemana perdió un 20,4%, en la actualidad la cotización de la empresa está en el entorno de los 91 euros y los analistas esperan que este 2025 avance un 27% más, hasta los 115 euros.
