
Este miércoles acaba el mes de julio y los futuros apuntan a una sesión tranquila en las bolsas europeas. El EuroStoxx 50, no obstante, no podrá cerrar el mes en positivo ya que todavía se deja más de un 1% en julio, al contrario que el Ibex, que sí se anota más de 2 puntos. La sesión estará marcada por las reuniones de los bancos centrales, especialmente de la Reserva Federal.
Desde el punto de vista técnico, "el EuroStoxx 50 ha firmado su cuarto mes de consolidación que tuvo como origen los 5.121 puntos de abril aunque todo apunta que después de esta fase de digestión la tendencia alcista se retomará y el EuroStoxx 50 acabará marcando nuevos máximos del año", explica Joan Cabrero, asesor de Ecotrader.

"Por tanto, las caídas las veo como una oportunidad para volver a comprar bolsa europea con una mejor ecuación rentabilidad/riesgo que la que teníamos apenas hace un par de meses", sigue el experto. "Las caídas de la semana pasada llevaron al índice a quedarse a apenas un 2% de alcanzar la parte superior del rango de los 4.600/4.675 puntos, que es por donde discurre la directriz alcista que surge de unir los mínimos de 2022 y de 2023, zona esta en la que no deben pensar en vender sino en todo lo contrario", concluye Cabrero.
El Banco de Japón sube tipos y recorta la compra de bonos
En los últimos días el mercado empezó a descontar que el Banco de Japón sí movería ficha en esta reunión, en la que efectivamente ha elevado los tipos de interés en 25 puntos básicos, situándolos en el 0,25%, primera zona positiva desde 2010. Asimimo, ha anunciado un recorte en la compra de deuda.
El mercado esperaba una subida menor del tipo de interés pero un recorte de las compras algo más osado, ya que todavía en 2026 estaría comprando cerca de 20.000 millones de dólares al mes. La reacción ha sido tibia, con moderadas subidas en bolsa y el yen fluctuando entre las pérdidas y las ganancias tras un rally de más del 5% desde los mínimos del año.