Madrid 
Oficialmente ya ha llegado el verano y, aunque el calor comience a apretar cada día con más fuerza, la lluvia de dividendos continúa en la bolsa española y de hecho lloverá con más virulencia en julio, cuando se producirá una de las mayores temporadas de dividendos. La próxima semana será la fecha límite para cobrar los pagos de dos importantes utilities españolas: Endesa y Redeia. Los inversores deberán estar atentos porque las rentabilidades que ofrecen ambas compañías no son baladí. Sobre precios actuales, los pagos de estas eléctricas superan el 2%.
Aquellos inversores que quieran optar a los dividendos, ya sea de una o de ambas compañías, deberá tener en cartera las acciones de estas firmas antes del próximo 27 de junio, fecha a partir de la cual los títulos tanto de Endesa como de Redeia comenzarán a cotizar sin derecho a cobro. También las dos empresas abonarán a sus accionistas el importe de sus dividendos en la misma fecha: el próximo 1 de julio. Consulte aquí el calendario de dividendos.
Endesa abonará 0,50 euros brutos por cada acción poseída a sus accionistas lo que, sobre precios actuales, deja una rentabilidad del 2,6%. Este pago es el último y complementario con cargo a 2023 y se sumará al ya distribuido en enero, también de 0,50 euros brutos, con lo que la rentabilidad total se acerca al 5,3%solo por la vía del dividendo.
Así, Endesa habría cumplido con sus pronósticos fijados en su Plan Estratégico 2024-2026, en el que establecían el suelo del dividendo sobre los beneficios de 2023 en 1 euro por acción. A partir de ahí, el objetivo de Endesa es incrementar esta retribución a sus accionistas hasta el 1,1 euros por acción en 2024 y alcanzar el 1,5 euros por acción en 2026. Todo ello a través de dos pagos anuales y manteniendo una política con un payout (porcentaje de los beneficios que se destina al reparto de dividendos) del 70% en el periodo que abarca el plan. De esta forma, teniendo en cuenta las estimaciones de beneficio neto del consenso de analistas que recoge FactSet (1.680 millones de euros), Endesa distribuiría hasta un total de 1.176 millones de euros en dividendos con cargo a 2024.
Cabe destacar que Endesa llega a este último pago con cargo a 2023 con su cotización en máximos del pasado enero y rozando los 19 euros por acción. La relajación de las rentabilidades de los bonos, así como el inicio de una política monetaria más acomodaticia están sellando el regreso de los inversores a estas compañías, rentables en épocas en las que la renta fija apenas ofrece rendimiento. De este modo, tras haberse revalorizado alrededor de un 3% en el ejercicio, los expertos esperan que sus acciones sigan avanzando hasta un 10% adicional durante los próximos meses, fijando su precio objetivo en los 20,80 euros.
Más rentable es incluso el próximo pago de Redeia. La eléctrica española distribuirá entre sus inversores un dividendo de 0,7273 euros por cada título que se posea. Sobre niveles actuales, esta retribución ofrece una rentabilidad del 4,2%.
Al igual que en el caso de Endesa, este es el último pago y complementario al dividendo con cargo a 2023 y se uniría al primero distribuido en enero que tuvo un importe de 0,2727 euros brutos por título. En conjunto, Redeia habría repartido 1 euro por acción sobre los beneficios generados el ejercicio pasado (690 millones de euros, las ganancias más elevadas desde 2018) que sobre precios actuales alcanzarían una rentabilidad total del 5,8%. Este pago estaría por encima del suelo fijado en su Plan Estratégico hasta 2025, en el garantizaba un reparto mínimo de 0,8 euros por acción.
Al igual que Endesa, Redeia también llega a este pago en un momento bursátil dulce, pues su cotización se sitúa en niveles de diciembre del 2022 y los analistas aún ven algo más de recorrido para sus acciones en los próximos meses. Además, la utility se hace con la mejor recomendación desde abril del 2012, aunque continúa siendo un mantener.
Pese a todo, y aunque el último cambio de regulación eléctrica vaya a beneficiar a estas compañías, el consenso de analistas que recoge FactSet prevé beneficios decrecientes para los próximos ejercicios. En concreto, los de 2024 serán hasta un 27% inferiores a los del 2023 y hasta 2026 continuarán por debajo de los 600 millones de euros. Ante este escenario, las previsiones de los analistas son que la retribución de Redeia tanto en 2024 como en 2025 se mantenga en el suelo fijado, en 0,80 euros por acción.