
Un primer semestre sorprendente, en primer lugar por la resiliencia de la economía norteamericana, que reduce las expectativas de bajadas de tipos de interés por parte de la Reserva Federal de las seis que se esperaban en enero a las tres o dos que se pronostican ahora. Y en segundo lugar porque lo que parecía que iba a ser el año de la renta fija ha acabado siendo un ejercicio en el que algunos índices bursátiles registran ganancias de doble dígito, como es el caso del Ftse MIB, el Ibex o el EuroStoxx, y con la bolsa norteamericana acercándose a este rendimiento.
En este escenario, las principales gestoras españolas (CaixaBank, Santander, BBVA e Ibercaja), que aglutinan el 60% de los activos bajo gestión de los fondos de inversión, siguen viendo potencial a la renta variable norteamericana, para afrontar un período de mayor volatilidad, aunque tácticamente están diversificando por geografías y en sectores más cíclicos, como la bolsa europea, incrementado algo más la ponderación de los mercados emergentes, pero sin confiar demasiado en el despegue de China.
Jaime Martínez, responsable global de asignación de activos de BBVA Asset Management, resume de manera precisa por qué mantienen la convicción en renta variable. "A día de hoy no nos encontramos con un optimismo o un pesimismo extremos, la tendencia del mercado es alcista, casi en máximos históricos de varios índices. El mercado lo ha hecho bien en los últimos meses porque percibía que era el final del ciclo de la subida de tipos. Estamos con el viento a favor de los bancos centrales y la clave es no ir en contra de ellos ni de la tendencia de los mercados. Mientras estas dos cosas apoyen, estaremos largos de bolsa, salvo que pase algo extraordinario o el sentimiento del mercado se vaya a un sitio extremo", apunta.
"La única apuesta estructural que tenemos dentro de mercados desarrollados es Reino Unido, porque está muy barato y está experimentando una reaceleración de la actividad, con sorpresas económicas positivas, y con las materias primas al alza, tiene peso en sectores que se benefician. De hecho, estamos valorando ponernos largos de mineras de oro. Y en tecnología, estamos un pelín infraponderados", señala.
Santiago Rubio, responsable de estrategia de inversión de banca privada y personal de CaixaBank, apunta también que su principal apuesta es que la bolsa va a seguir subiendo pero de una manera "más democrática y dispersa" respecto al año pasado. "Estamos largos en exposición en renta variable pero diversificando mucho por capitalización de las empresas, fijándonos en aquellas de tamaño mediano; por sectores, saliendo de la monoapuesta de la inteligencia artificial (IA); por geografías, incrementando el peso de la eurozona; y diversificando el estilo crecimiento, equilibrando con el de valor", comenta Rubio. En este sentido, se encuentran más positivos con los sectores más cíclicos, desde viajes, turismo o consultoría empresarial, mientras que en el sector financiero están sobreponderados.
En Santander AM también se encuentran positivos en renta variable, pero previendo episodios de volatilidad hasta que no se relajen los datos de inflación, "preferimos estar en las bolsas de más calidad y defensivas, como la estadounidense, a través de compañías de gran capitalización", asegura Nerea Heras, responsable de Fondos Core de GMAS de Santander Asset Management. Respecto a Europa, "estamos muy neutrales. En estos últimos meses apostamos por sectores más value, como el bancario, y también tuvimos una apuesta en la parte de tecnología, pero hemos tomado beneficios", subraya.
En la gestora de Ibercaja también prefieren bolsa americana antes que la europea. "Estratégicamente preferimos Estados Unidos, sobre todo por nuestra temática de tecnología, en la que seguimos positivos. Pero este mes nos hemos puesto tácticamente más positivos en Europa, sobre todo analizando los últimos datos de la economía, donde se ha visto un suelo y ya ha empezado a resurgir. Ese diferencial de crecimiento y el de valoración hacen que pueda tener algo más de recorrido tácticamente", señala Beatriz Catalán, directora de inversiones de Ibercaja Gestión.
En esta firma están convencidos de que este será buen año de renta variable, aunque "no veremos rentabilidades muy por encima del doble dígito", indica Catalán. "Y ese doble dígito lo hemos estado viendo en apenas tres meses. En marzo vimos ciertos síntomas de fatiga y lo que hicimos fue adoptar coberturas en nuestras carteras, y bajar algo la exposición. Era necesaria una corrección y tras ella y, con la corroboración otra vez de los resultados empresariales, nos está dando un impulso para ver otra fase de crecimiento en el mercado", subraya.

Por sectores, los más cíclicos y de crecimiento como tecnología y también una parte de defensivos, que "este año la hemos buscado más a través de un sector como el de consumo básico. Y dentro de éste, nos gustan las compañías de alimentación con sesgo a las bebidas y también las de cuidado personal", enumera Catalán.
Bolsa española
Dentro de esta mayor preferencia táctica por la bolsa europea buscando recoger la subida de los sectores cíclicos, la bolsa española ha cobrado protagonismo en las carteras, como corroboran los responsables de asignación de activos de las principales gestoras. "Como incrementamos el peso en Europa de manera importante en el mes de febrero y como nos gustan los cíclicos, de manera natural hemos llegado a estar sobreponderados en España", reconoce Santiago Rubio.
"Si te gustan los bancos hay que estar en bolsa española. Aunque podamos tener bajadas de tipos de interés hasta finales de 2025, los tipos no se irán a cero, así que vamos a seguir teniendo un margen en los balances que hace tiempo que no teníamos y un nivel de ROTE bastante decente. Se esperaba un empeoramiento mayor tanto de los volúmenes como de la calidad de los préstamos, pero lo que vemos es que el deterioro económico no va a generar tal daño. Por tanto, mientras no veamos grandes deterioros de las tasas de paro, tampoco habrá grandes problemas en cuanto al deterioro de la calidad crediticia. Y, en este sentido, España, por su importante peso en bancos, nos gusta", subraya la responsable de inversión de Ibercaja Gestión.
Respecto a si las salidas a bolsa como la de Puig y la probable de Europastry podrían animar el mercado de renta variable español, Heras reconoce que sí se ha visto un apetito inicial, pero "tampoco se están viendo grandes flujos de dinero". Martínez matiza que estas operaciones no influyen a la hora de decidir invertir. "La bolsa española tiene un peso pequeño en las carteras, similar al que tiene en Europa y en el mundo", señala.
Santiago Rubio, por su parte, admite que al incrementar el peso en sectores cíclicos, lo han hecho también de manera natural en la bolsa española. "Como incrementamos el peso en bolsa europea de manera importante en el mes de febrero y como nos gustan los cíclicos, de manera natural hemos llegado a estar sobreponderados en España", afirma.
Mercados emergentes
En esta búsqueda de compañías y geografías más cíclicas, los mercados emergentes han vuelto a situarse en el radar de las principales gestoras, aunque con diferentes baremos y bajo la lupa de lo que haga la Reserva Federal norteamericana. "Con la volatilidad en aumento no son unos activos que incrementaríamos en los próximos dos o tres meses, aunque son mercados que como diversificadores siempre pueden incluirse en cartera y, de hecho, siempre tenemos una parte", explica la responsable de Fondos Core de GMAS de Santander AM, quien subraya que China no es un uno de sus mercados favoritos en estos momentos.
En Ibercaja Gestión, en cambio, aseguran que están neutrales en las carteras con el gigante asiático. "Es cierto que hubo muchas dudas sobre la presentación del plan de crecimiento por parte del gobierno chino y eso dio un poco de inestabilidad. Pero algunos datos nos hacen ver un cierto resurgir y hay que poner en precio la valoración del mercado y las perspectivas de crecimiento", apunta Catalán, a quien también les gusta India dentro del universo de emergentes.
De la misma opinión se muestra Santiago Rubio, aunque en CaixaBank son más cautelosos. "Entramos en el año con unas posiciones largas respecto a nuestros mandatos en todo lo que era mercados emergentes excepto China, y en marzo nos pusimos neutrales en bolsa china porque tiene riesgos de gobernanza y la intervención pública es muy agresiva", advierte el responsable de estrategia de inversión de CaixaBank, quien apunta que en la firma prefieren los emergentes con un sesgo claramente cíclico, de materias primas, y beneficiarios de la reindustrialización, como México y algunos países asiáticos. Pero "no son apuestas muy agresivas".
Inteligencia artificial
Frente al recorrido que está teniendo en el mercado la narrativa de la inteligencia artificial, en las gestoras apuestan por mantener las posiciones pero de manera indirecta, invirtiendo en las firmas que se benefician de las herramientas que proporciona para mejorar su productividad y en las grandes tecnológicas teniendo en cuenta su valoración. "Nosotros no invertimos en empresas directamente, lo hacemos todo a través de fondos o ETF. Cuando todo el desarrollo de la IA produzca un efecto real en la economía a través de mayor productividad será el empuje necesario para que veamos mayores valoraciones de estas compañías. Hay una gran parte de esperanza en que efectivamente pueda ser un incentivo muy fuerte y, por ende, se produzca una caída de costes laborales en general ,y entonces la economía siga subiendo y sin inflación… sería un mundo ideal", augura Heras.
Catalán explica que en Ibercaja Gestión modulan el posicionamiento en función de la valoración. "Al final todo tiene un precio, pero nosotros somos fervientes creyentes de que la temática de inteligencia artificial está todavía muy, muy en los inicios, pero faltan todavía muchas fases: falta que se desarrolle toda la infraestructura y finalmente se instale también en todas las compañías de servicios y de software. Con lo cual, el plazo de monetización va a ser bastante elevado", comenta.
En CaixaBank les gusta este tipo de firmas, pero "el mercado está muy centrado en apostar por los fabricantes de herramientas de IA como Nvdia o las nubes de Microsoft o Amazon, y los grandes beneficiarios van a ser quienes usen dichas herramientas. El potencial de mejora de todas las empresas de servicios cíclicos, incluido el financiero, está muy ligado a la puesta en marcha de la inteligencia artificial en esos sectores. Nos parece más atractivo apostar por la IA a través de los usuarios finales", reconoce Rubio.
Criptos
Sobre la incorporación de criptoactivos a las carteras, un activo que no pueden incluir por mandato, los responsables de las principales gestoras españolas insisten una vez más en que no es un activo que consideren invertible, por el momento. "Nosotros solo trabajamos con activos financieros que generen rentas futuras. Podemos intentar evaluar el crecimiento de esas rentas, pero no sabemos qué va a pasar con el bicoin, explica Rubio.