
El Banco Central Europeo tuvo su protagonismo en la semana, así como el presidente de la Reserva Federal. Sin embargo, ha sido en el parqué nacional donde se ha dado la campanada. El Ibex 35 cerró la sesión del viernes por encima de los 10.300 puntos (10.305,7, en concreto) y lidera las alzas dentro de la bolsa europea. Esto permite al selectivo cotizar en niveles no vistos desde 2018 y aspira a batir esos 11.000 puntos para los que dista una subida adicional del 7%.
Eso sí, no será en el más inmediato de los plazos. El asesor de Ecotrader, Joan Cabrero, ya adelantó para los lectores del portal para inversores de elEconomista.es que el Ibex 35 llegaría a los 10.300 puntos, que son los máximos del año pasado, más pronto que tarde. No obstante, resultó ser más tarde que pronto. El resto de índices europeos ya superó con anterioridad sus homólogas referencias técnicas e índices como el EuroStoxx 50 cotiza en máximos históricos en subida libre absoluta (situación técnica más alcista posible).
Es decir, el Ibex 35 lidera las alzas de la semana con una subida del 2,5%, pero en el año sigue rezagado respecto a sus pares, ya que avanza un 2,1% mientras el EuroStoxx roza el 10%. La brecha podrá estrecharse, pero el experto de Ecotrader no descarta consolidaciones por el camino. "El siguiente objetivo que manejo para el Ibex 35 está en los 11.000/11.200 puntos pero sigo siendo cauteloso y recomiendo prudencia. El año es muy largo", explica Cabrero.
En este sentido, el análisis técnico invita a seguir la conocida como 'regla de la alternancia' que consiste en esperar alguna diferencia de comportamiento en el selectivo que señale nuevos puntos de inflexión o futuras tendencias. Pero será en Wall Street donde se origine ese cambio que arrastrará a la bolsa europea.
El Nasdaq 100 es hasta la fecha uno de los impulsores de la renta variable gracias a las subidas de los principales valores ligados a la inteligencia artificial. Pero recientemente se generó un hueco bajista, gracias a Nvidia, que suele ser indicativo de una subida vulnerable y el principio de una corrección más severa. "A priori, la tendencia alcista seguirá mandando en el índice tecnológico, pero una pérdida del soporte de los 17.800 puntos del Nasdaq sería el signo de que los bajistas toman el control", aventura Cabrero.

Más allá del aspecto técnico, la semana deja dentro del Ibex 35 dispares movimientos por valores. Grifols registró de nuevo la peor evolución de la semana al caer más de un 7% desde el lunes. En la última sesión, la compañía anotó un alza de casi el 20% por la publicación de sus cuentas auditadas por parte de KPGM. Sin embargo, no fue suficiente para tapar la sangría que provocó un nuevo ataque de Gotham City a la situación financiera del grupo.
Lo cierto es que las caídas son la anécdota dentro del índice ya que solo seis valores cierran el viernes por debajo del precio por acción del arranque del lunes con Naturgy, Sacyr y Repsol entre las peores por detrás de la catalana de hemoderivados. En la parte alta de la tabla se sitúan Acciona, que sube casi un 7% en estos cinco días, BBVA, Solaria y Acciona Energía.
Estas dos últimas protagonizan un rebote desde que comenzó marzo del 10% de media. Tras las palabras de la presidenta del BCE, Chistine Lagarde, el mercado interiorizó que los costes de financiación se mantendrán al nivel actual por lo menos hasta junio, según las expectativas que recoge Bloomberg. Con la actualización de las previsiones se actualizaron las valoraciones de Solaria y Acciona Energía que empiezan a alinearse con su cotización actual.
Además, en la semana BME comunicó que no se realizarán cambios en la composición del Ibex en esta ocasión al mantenerse las 35 compañías actuales como las más líquidas de la bolsa española. Y es que las dos valores que más papeletas tienen para entrar en el índice, Viscofan y Vidrala, no tienen todas consigo para arrebatar el puesto a valores como Meliá Hotels actualmente dentro del Ibex con mayor volumen de negociación que las dos anteriores.