
La semana que viene tendrá mucha influencia en la evolución semanal de las predicciones y proyecciones que analistas e inversores desarrollan de manera recurrente sobre los tipos de interés que imponen los grandes bancos centrales del planeta.
Sobre todo, porque se conocerán varios de los datos que más influyen en su evolución, los que miden la evolución de los precios y del crecimiento económico.
El miércoles se publicarán las cifras preliminares del PIB (Producto Interior Bruto) del cuarto trimestre de 2023 en la eurozona y el jueves en Reino Unido. "Ambas regiones presentaron resultados débiles en el tercer trimestre de dicho año: sin crecimiento en la eurozona mientras que la economía británica se contrajo un 0,1%", adelantan desde Allianz Global Investors. "Además, se publicarán la encuesta empresarial ZEW de febrero en Alemania (martes), y en la zona euro, la producción industrial (miércoles) y la balanza comercial (jueves)", añaden. Y también habrá que prestar atención a la tasa de desempleo de la región.
En EEUU, los inversores estarán también muy atentos a los próximos datos de inflación. Se conocerá el IPC (índice de precios al consumo) y el IPP (índice de precios del productor) de enero, además de las expectativas de inflación del consumo de febrero que proporciona la Universidad de Michigan.
El jueves también se publicarán las ventas minoristas de EEUU, la producción industrial y la confianza de los constructores de viviendas.
En Asia, la semana vendrá marcada por las celebraciones del Año Nuevo Chino que mantendrán muchos mercados de la región cerrados. Aún así, en Japón destaca la publicación del índice de precios del productor (IPP) de enero y el dato provisional del PIB del cuarto trimestre de 2023. Las estimaciones de consenso apuntan a un sólido repunte del 1,2% tras una desalentadora contracción del 2,9% en el tercer trimestre del año pasado.
