
"Si quieres hacer una inversión de impacto", las compañías que permiten tener dicho impacto "no siempre son 100% perfectas", ha advertido este martes Guy Janssens, jefe del área de Especialistas de Inversiones en BNP Paribas Fortis, durante su intervención en un seminario online organizado por la gestora Candriam. Visite el portal especializado elEconomista Inversión sostenible y ESG.
Janssens incidió en la idea de que las empresas marrones que están en ese proceso de transición (bien energética, bien social) son claves, y que deben estar presentes en los fondos sostenibles más puros. "Las compañías de petróleo y gas que ya han avanzado mucho en esa transición, ¿por qué no van a estar en productos artículo 9? Si quieres crear un fondo artículo 9 con compañías que ya son 100% verdes el impacto es limitado", ha señalado.
Estos fondos, los artículo 9, también conocidos como verde oscuro, son los más exigentes en sostenibilidad de acuerdo con el Reglamento europeo de Divulgación (SFDR o Sustainable Finance Disclosure Regulation, en inglés). "Tenemos que ser un poco más realistas en los productos artículo 9, porque los clientes no invertirán en ellos si no tienen impacto"; "En mi opinión, la definición de los productos artículo 9 es demasiado estricta, pero creo que se irá desarrollando en la buena dirección", ha añadido.
En el evento -moderado por Marie Niemczyk, jefa de Gestión de Cartera de Clientes ESG en Candriam- se habló del peligro de greenwashing –fraude verde, es decir, que se llame verdes o sostenibles a fondos que no lo son-. Vincent Triesschijn Global Head ESG and Sustainable Investing, ABN AMRO, afirmó: "Existe mucho debate en torno a la presencia de inversiones en combustibles fósiles en los productos artículo 9. El hecho de que estemos viendo cada vez más y más ejemplos en el mercado que son cuestionables está mostrando que estos requisitos de transparencia establecidos por SFDR para aumentar la transparencia en general está funcionando […] Necesitamos asegurarnos de que no hay greenwashing, pero también de que subimos a todo el mundo a bordo de esta transición hacia un mundo más sostenible. Esto implica implicarnos con grandes corporaciones. Triesschijn abogó por llegar a un equilibrio que es difícil de conseguir: "Por un lado, tenemos que asegurar que los fondos artículo 9 lo sean realmente; por otro, cuantos más requisitos se aplican a estos fondos, mayor es el rechazo, especialmente por parte de los gestores de fondos de EEUU, a introducir fondos artículo 9", señaló. Lea también: Sube la presión de los reguladores para evitar el greenwashing.
Con datos de Morningstar de mediados de enero, los fondos clasificados como artículo 9 representaban solo un 3,3% del total del patrimonio en fondos a la venta en la UE. Este porcentaje se redujo drásticamente en los últimos meses, ante la entrada en vigor, en enero de 2023, de las nuevas exigencias de reporte que implica la SFDR. Se trata del nivel 2 de este Reglamento, que implica la divulgación detallada de cómo y en qué invierten los fondos sostenibles. Para los artículos 9, estos requisitos son los más elevados. Vicent Triesschijn también señaló que la SFDR hace mucho más fácil su trabajo como selector de fondos. "En lugar de tener que enviar cuestionarios a las gestoras, que reciben 20 cuestionarios distintos de 20 selectores de fondos, ahora debemos confiar en estas plantillas de la SFDR", alabó.
Por su parte, Anyve Arakelijan, asesora de política regulatoria en el área de ESG de Efama (la es la Asociación Europea de gestoras y fondos) reivindicó la necesidad de formar al inversor retail en estos conceptos. Recordó que, según un reciente estudio, la mitad de la población en la OCDE no conoce ni siquiera los términos financieros más básicos, como inflación, diversificación o riesgo. "Se necesita más educación en finanzas sostenibles para que entiendan de forma completa los estándares de los participantes de los mercados financieros y, de ese modo, sean capaces de tomar decisiones de inversión informadas", afirmó. La industria, añadió, debe ayudar a cerrar ese gap.