La desesperación de los inversores por recibir una pista por parte del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, sobre un posible freno o el fin a las subidas de tipos de interés, preocupa al estratega de mercado Mohamed El Erian, Jefe Asesor Económico de Allianz.
"La inflación está aún en niveles más preocupantes de lo que podría implicar un giro en la política de tipos", dijo El-Erian en una entrevista de Bloomberg Television. "El riesgo sigue siendo que la Fed haga muy poco para frenarla, y ese sigue siendo el mayor riesgo a futuro".
Los mercados ya han asumido una subida de 75 puntos básicos en la reunión de este miércoles, pero todas las miradas están puestas sobre Powell y las pistas que dé en la rueda de prensa posterior sobre los planes del banco central para las próximas reuniones. La pregunta que divide a los analistas es si indicará otra subida de 75 puntos en diciembre, o si dejará la puerta abierta a reducir el ritmo a 50 pb o menos y esperar a ver si las subidas actuales empiezan a frenar los precios en los próximos meses.
Las fuertes alzas bursátiles de las últimas semanas -el Dow Jones registró en octubre sus mayores alzas mensuales desde 1976- indican que los mercados ven una desaceleración en las subidas de tipos, y creen que la Fed y los otros grandes bancos centrales empezarán a preocuparse por el riesgo de que sus economías caigan en una recesión.
El-Erian, quien ya dijo hace más de un año que la Fed iba con retraso a la hora de luchar contra la inflación, manifestó su preocupación porque "nos estamos deslizando lentamente hacia la estanflación. Podemos acabar con un parón en EEUU y en China sin haber logrado solucionar el problema de la inflación".
Y aunque criticó a Powell, El-Erian dejó en claro que la Fed se encuentra en una posición "realmente complicada". "Si formara parte de la Fed, me costaría decidir cuándo parar, porque el mercado se ha escapado de nuevo", dijo El-Erian. Powell "está tratando de jugar una partida en tres dimensiones por su doble mandato" de mantener la inflación bajo control sin perjudicar el empleo ni la economía de EEUU. "Esta va a ser una reunión difícil" para la Fed, concluyó.
