
La Comunidad de Madrid, emisor habitual de deuda sostenible, colocó este martes un bono verde de 500 millones de euros a 7 años, según recogió Bloomberg. Lo hizo en un momento en que los rendimientos de la deuda pública acumulaban varias sesiones de descensos, lo que le permitió abaratar el coste exigido por los inversores. Visite elEconomista Inversión sostenible y ESG, el portal verde de elEconomista.es.
La región salvó los muebles, ya que recibió demanda por el mismo importe ofertado, 500 millones, y pagó 23 puntos básicos (el diferencial que estaba planteado de entrada) por encima de la referencia, un bono verde del Reino de España con vencimiento el 31 de octubre de 2029. Dicha referencia se negociaba a media mañana de este martes con un rendimiento próximo al 2,59% (solo una semana atrás, esa rentabilidad rebasaba el 3%). De ahí que el cupón quedase finalmente fijado en el 2,82%.
Los bancos colocadores fueron BBVA, CaixaBank, Crédit Agricole-CIB, ING y Santander, según detalló Bloomberg, que citó a fuentes próximas a la operación. Lea también: España apunta a la máxima exigencia en fondos de inversión ESG.
Los fondos captados se destinarán a financiar proyectos elegibles dentro del Marco de Financiación verde de la Comunidad de Madrid, en cualquier caso "con un claro beneficio social y/o ambiental", según se detalla en una presentación para inversores elaborada por la Comunidad. Este documento detalla que, bajo este Marco de Financiación, Madrid puede emitir instrumentos que incluyen bonos verdes, sociales, de sostenibilidad, bonos temáticos, colocaciones privadas y préstamos. También se explica que todas estas financiaciones serán objeto de informes de impacto anuales, hasta la asignación completa de los ingresos de los instrumentos de financiación sostenible.