No hay marcha atrás para los banqueros centrales. Deben seguir (esta vez sí) la hoja de ruta que llevan meses anticipando a un mercado al que le han acostumbrado a dictarle cuáles serán sus próximos pasos para evitar sustos. Y esto caerá como agua de mayo en los bancos españoles, los más beneficiados de la zona euro por la subida de los tipos de interés -dado su perfil retail y, por ende, hipotecario-.
De momento, dentro del Ibex 35 las tres grandes entidades, Santander, BBVA y CaixaBank, atesoran un potencial medio del 30% a doce meses vista. Y la firma presidida por Ana Botín, tras el chaparrón bajista de ayer después de presentar sus resultados, cuenta con el mayor recorrido, de hasta el 40% por encima de los 4 euros por acción. En todo caso, Santander y BBVA son las dos grandes del Ibex -de las 15 firmas más ponderadas- con un mayor potencial, solo superadas por el 42% de Cellnex.

En lo que va de año, los bancos del Ibex suben un 10%, doce puntos por encima del índice, que pasó al negativo esta semana de nuevo. Y esto es importante si se quiere confiar en la bolsa española este año, donde el sector financiero representa una ponderación del 38%, la mayor.
Superar el coste del capital
Lo que descuenta el mercado es que Christine Lagarde podría verse obligada a acelerar su hoja de ruta ante una inflación desbocada. Se espera que cierre 2022 en niveles del 5,1% en la eurozona, por encima del 3,7% de previsión para el PIB. Es la primera vez que el IPC se come el crecimiento de la economía desde 2012, cuando estaba en cotas del 2,5% y la zona euro, en recesión.
El Euríbor 12 meses acumula una revalorización en el año del 63%. En casi cuatro meses ha pasado de cotizar al -0,5% el primero de enero a escalar hasta el 0,134% de ayer. Se encuentra en máximos de 2015, de todo el periodo de tipos suelo que ha invadido la economía de la eurozona desde que en 2016 el BCE decidiera llevarlos al 0%. Ahora, por primera vez, existe la creencia firme de que esta tendencia ha cambiado radicalmente -no como sucedió en amagos previos- y se esperan hasta tres o cuatro subidas del precio del dinero en la zona euro -previsiblemente, se producirían en las reuniones de la institución de julio, septiembre, octubre y diciembre- hasta 75 puntos básicos en el conjunto del año.
¿Una de las consecuencias? Por primera vez en una década la rentabilidad de la banca superará el coste del capital. El consenso estima un ROE (en sus siglas en inglés) del 10,5% este año. Bankinter contará con el más elevado: en el 11,7% (tal y como cerró el primer trimestre), seguido de Santander (con un 11%, aunque cerró marzo en el 11,49%) y con CaixaBank en el 10,8% y BBVA en el 10,2%. Esto, en la teórica del mercado, les tendría que llevar a cotizar con prima sobre el valor de sus recursos propios, frente a descuentos medios del 20%-30% actuales. Y, de ahí, el potencial.
Más allá de los tres grandes, Unicaja es la entidad con mayor potencial (un 44%) y Sabadell de hasta el 30%, después de anotarse en lo que va de año otro 20%, a la cabeza de Europa junto a CaixaBank. Son, las tres mencionadas, las llamadas a liderar la mejora de los márgenes de intereses una vez que el Euríbor y la subida de tipos vayan calando en cada estrato de sus resultados debido a la elevada exposición a hipotecas y, sobre todo, a empresas como es el caso de Sabadell (donde los intereses por préstamos son más elevados, de menor duración y pueden ser incluso revisados).
Los analistas -que están a la espera de que presenten los trimestrales todos los bancos- permanecen pendientes de incluir en sus cálculos la subida de tipos. De momento, las previsiones para el beneficio de los seis cotizados españoles mejora un 5,7% desde enero para 2022 -sobre todo en Sabadell, con un 14%-; y otro 7% para 2023.
Pero, cuidado, porque un escenario inflacionista tiene también doble cara. Los consumidores de España e Italia serán los más afectados por la subida de tipos de toda la eurozona, según Carraighill, una firma de análisis de Dublín de las que se hace eco Bloomberg. Calculan que por cada aumento de 50 puntos básicos, recortará 100 puntos el consumo. Ese mismo impacto en Alemania será del 0,3%.
Santander marca el paso
Por primera vez en años la exposición de las compañías nacionales a Brasil podría beneficiar al Ibex frente al resto de Europa. De momento, la brecha abierta con el EuroStoxx 50 sigue siendo de 10 puntos porcentuales en el año.
El real brasileño ha pasado a ser un viento de cola. Es la divisa más alcista frente al euro en el año, sube un 19,2% y esto es relevante no solo para Banco Santander, que presentó sus resultados trimestrales ayer (ver página 9), sino también para otros gigantes como Telefónica, Mapfre o Iberdrola que llevan años soportando mínimo tras mínimo del real.
En el caso de la entidad santanderina, el primer trimestre en Brasil se saldó con un beneficio neto de 627 millones de euros, un 0,7% menos que en 2021; aunque sube el margen de intereses, casi un 7%, y el 24,6% del total del resultado atribuido al grupo.
Ida y vuelta de Santander
La entidad llegó ayer a subir un 3,6% y a caer un 6,8% en la misma sesión en la que presentó sus resultados. El optimismo inicial dio paso a ciertas dudas en el medio plazo como "un mayor coste del riesgo en Brasil, la debilidad económica en Europa o cómo una posible adquisición de la filial mexicana de Citi podría ser financiado", apunta Renta 4.
Los analistas de Citi, que también mencionan las posibles compras del Santander creen que la entidad "no es una compra clara teniendo en cuenta, además, la generación de capital neta prevista para 2022". En la parte contraria, Crédit Suisse destaca cómo el banco ya está recogiendo en sus resultados los tipos al alza en "Reino Unido, Polonia, Brasil y México".