Las encuesta de gestores que elabora Bank of America mensualmente ha venido a confirmar los movimientos de flujos de inversión que se han visto claramente dibujados en las bolsas en su arranque del año. "En enero los inversores han rotado sus carteras saliendo de la tecnología (ante unos bancos centrales más hawkish [agresivos]) y han vuelto a posicionarse en el ciclo (ante la reapertura global de las economías)", apuntan desde BofA. Se trata de una rotación lo suficientemente relevante como para haber llevado la sobreponderación en los portafolios de los sectores cíclicos -esto es "bancos, energía y materiales de construcción- "al nivel más elevado de la historia", señalan en el informe.
El sector bancario es el preferido por los gestores, según esta encuesta, con un saldo neto del 41% de las carteras en clara sobreponderación de estos valores. Son 21 puntos porcentuales más si se compara con el mes pasado, y el mayor porcentaje desde octubre de 2017. Por aquel entonces, el que era presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, lanzó un mensaje de tranquilidad al mercado, anticipando el fin de las compras de deuda y una plausible subida de tipos. Ninguna de las dos medidas fue llevada a término. En esta ocasión, la promesa de tres -y hasta cuatro- alzas del precio del dinero en EEUU-, acompañado por idéntica medida en Reino Unido y que debería seguir en 2023 el BCE, dan alas al sector bancario que verá mejorar, cuando se produzca, su margen de intereses. Por el momento, con tres semanas de cotización en el año, los bancos son el segundo sector más alcista en Europa, con el 10% y están en la parte alta también del S&P 500, con un 12%.
Nunca había existido una predilección tan clara por la bolsa frente a los bonos
Por otro lado, cae la sobreponderación en las carteras del sector farmacéutico -7 puntos, en concreto, en el último mes-, lo que no impide que siga siendo el segundo de mayor sobreponderación, con un 30%. Bank of America destaca, no obstante, la escalada de la industria y el sector de materiales básicos, seguidos de la energía -como petroleras y mineras- y del sector asegurador.
En la parte opuesta, la exposición a tecnología se desploma 20 puntos porcentuales en solo un mes, y cae a niveles mínimos de ponderación en las carteras desde el año 2008. También los gestores siguen reduciendo exposición a utilities, el sector más infraponderado a nivel global, seguido de las telecos.
Europa sobre EEUU
Por zonas geográficas, un 35% de los gestores consultados dice tener una exposición neta superior a la eurozona, frente a solo el 5% que se posiciona más favorable a Wall Street. La apuesta por EEUU no era tan baja desde hace justo un año. Reino Unido es, por el contrario, el mercado donde concentran sus posiciones más pesimistas, seguido de países emergentes. En términos generales, la encuesta sigue mostrando la fortaleza de las bolsas sobre cualquier otro tipo de activo de inversión. Prueba de ello es que nunca en la historia (desde que se realiza esta encuesta) había existido una predilección tan clara en favor de la renta variable sobre el mercado de bonos. La renta fija es, de hecho, y tras ver lo que ha corrido en los últimos meses, el único activo sobre el que claramente están infraponderados los gestores.
La renta variable es el primero -con un 55% de posiciones netas favorables-, seguido de la liquidez, las commodities -en máximos-, inversiones alternativas -con algo más del 20%- y el sector inmobiliario -con el menor nivel de sobreponderación desde septiembre del año pasado-.
El Covid está dejando, paulatinamente, de ser un riesgo elevado para el devenir de las inversiones. Ha caído de la tercera a la quinta posición en el ranking de los mayores peligros que identifican los gestores, según la encuesta de BofA, en el mes de enero. El primero de ellos, y no abandona su sitio, sigue siendo una política más agresiva por parte de los bancos centrales; seguido, en segundo lugar, de la inflación. El riesgo de posibles burbujas en la valoración de activos y el miedo a un menor crecimiento global del esperado también se colocan por delante de un nuevo rebrote de la pandemia.