
Las nuevas medidas anunciadas por el G20 en la cumbre celebrada en Londres, así como la flexibilización del llamado mark-to-market en EEUU han sido recibidas con entusiasmo por los inversores del parqué neoyorquino. El Dow Jones ha avanzado un 2,79%, y ha logrado acercarse a la cota de los 8.000 puntos. Además, el Nasdaq ha subido un 3,29% y ha pasado al terreno positivo en 2009. Más información en Ecotrader.
Por tanto, los acuerdos del Grupo de los Veinte (G20) en Londres han ayudado a que Wall Street mantuviera el optimismo con el que inició el segundo trimestre del año, y a que su principal índice subieran el 2,8% para quedar al filo de los 8.000 puntos.
El Dow Jones (DJI.NY) de Industriales, el indicador más importante de la Bolsa de Nueva York, avanzó más de 200 puntos y cerró en 7.978 unidades, lo que le permite acercarse cada vez más a su mejor racha al alza desde 1933.
Por su parte, el Nasdaq ha avanzado un 3,29%, hasta los 1.551 puntos, y ha conseguido pasar al terreno positivo en el conjunto del 2009. Además, el S&P 500 ha sumado en la sesión de este jueves un 1,66%, hasta los 811 puntos.
Estas subidas respondían a un ambiente de confianza que se ha instalado en Wall Street, así como en la mayoría de las plazas financieras, que, según los analistas, está ligado a la percepción de que la economía estadounidense, en recesión desde finales de 2007, está en vías de empezar a recuperarse.
Los analistas de Ecotrader han señalado sobre el cierre de la Bolsa de Nueva York que los alcistas se mantienen al mando y "sin poder hablar de una ruptura completamente feliz -el Nasdaq mantiene aún el filtro pendiente- hay que volver a destacar las ganancias, el intenso negocio, y la ruptura de nuevas resistencias por parte de los alcistas. Y todo ello, desde luego, les mantiene al mando del mercado..."
La reforma más profunda del sistema financiero
Esa percepción se vio reforzada por los acuerdos alcanzados entre los miembros del G20, que consensuaron acometer "la reforma más profunda del sistema financiero desde 1945", en palabras del presidente de Francia, Nicolas Sarkozy.
Esa reforma implicará tratar de acabar con los paraísos fiscales, propiciar una contabilidad más clara, limitar la remuneración de directivos y aumentar la supervisión de los mercados.
A ello se destinará más de un billón de dólares, que se utilizará, entre otros, para reforzar instituciones multilaterales como el FMI y constituir un Consejo de Estabilidad Financiera, que incluirá a todos los países del G-20, a los miembros del Foro de Estabilidad Financiera, a la Comisión Europea y a España.
A las noticias de Londres se sumaron las de Frankfurt, donde el Banco Central Europeo (BCE) acordó rebajar los tipos de interés hasta el 1,25%, y las de Estados Unidos, donde la Junta de Normas de Contabilidad Financiera (FASB) decidió impulsar determinados cambios en esas directrices, forzada por la presión del Congreso estadounidense y a petición de la banca.
Mayor regulación
Ese organismo, que determina las reglas contables en Estados Unidos y que reporta a la Comisión del Mercado de Valores del país (SEC), acordó la relajación de la controvertida norma mark-to-market, por la que se obligaba a valorar los activos anotados en las cuentas empresariales en función de los precios de mercado.
Otra noticia que contribuyó a mantener el optimismo fue la del repunte de la demanda de algunos productos en Estados Unidos, lo que permitió que los pedidos a las fábricas del país aumentaran el 1,8%, la primera subida después de seis meses de descensos consecutivos.
Todo ello eclipsó el mal dato publicado de que la cifra semanal de solicitudes de subsidio por desempleo en Estados Unidos aumentó en 12.000 la semana pasada y llegó a 669.000, el nivel más alto desde octubre de 1982.
Una jornada de ganancias
De los 30 valores que componen el Dow Jones de industriales solo 4 cerraron con descensos, aunque únicamente Pfizer perdió más de 1,5%.
Por contra, subieron más de un 5% Caterpillar (CAT.NY)(8,8%), General Motors (GM.NY) (8,3%), Honeywell International (7,98%), Du Pont (7,64%), Alcoa (AA.NY)(7,63%), The Walt Disney Company (DIS.NY) (7,56%), AIG (6,54%) y General Electric (GE.NY) (5,6%).
Como reacción a estos avances, que eran generalizados en plazas financieras de todo el mundo, el precio de los bonos del Tesoro estadounidense cayó y la rentabilidad, que oscila en sentido contrario, subió hasta el 2,75%.