
En poco más de un mes el mundo conocerá el nombre del nuevo canciller que pilote los mandos de la gran locomotora europea los próximos cinco años. Será el 26 de septiembre cuando Alemania vote un nuevo Bundestag, que a su vez elegirá al jefe de Gobierno que releve a Angela Merkel tras 16 años en el cargo. Y, por el momento, las encuestas muestran unos resultados ajustados y cada vez más igualados entre los tres principales partidos, con la CDU a la cabeza, seguida por los Verdes y el SPD en torno al 20%.
A la espera de que arranque la campaña y los candidatos pongan toda la carne en el asador, el Dax 30 se anota algo más de un 16% en el año y se sitúa en máximos nunca vistos por encima de los 16.000 puntos. Fráncfort es la plaza europea que más rebota desde los mínimos de marzo de 2020, cerca de un 90%, y casi duplica la subida del Ibex en el mismo periodo.
Una remontada apuntalada por las alzas de más del 30% que se anotan valores como Deutsche Post, Volkswagen y Daimler en el conjunto del año y que además prometen recorrido los próximos meses y sólidos consejos de compra. No en vano, el consenso de Bloomberg otorga al selectivo un potencial del 14% hasta los 18.245,14 enteros.
Fráncfort es la plaza europea que más rebota desde los mínimos de marzo de 2020
¿Cómo puede influir el resultado electoral en el comportamiento de la renta variable alemana? Analistas políticos y economistas advierten que los de 2021 son unos comicios diferentes a los que Alemania está acostumbrada por dos razones. La primera es que habrá más partidos en el parlamento que en décadas anteriores, por lo que las múltiples combinaciones de una coalición de tres partidos pueden ser posibles e incluso necesarias. La segunda es que es la primera vez en la historia que el canciller en funciones no se presenta como candidato.
"Aunque nuestro análisis estadístico de las elecciones anteriores ha demostrado que el cambio suele ser beneficioso para la bolsa alemana, esto podría aplicarse con precaución en esta ocasión", señala Raimund Saxinger, gestor de fondos senior de Oddo BHF Asset Management. El experto cree que aunque Armin Laschet será el ganador más probable y es considerado como el candidato de la continuidad, existen algunas diferencias. "El efecto del cambio puede producirse de todos modos, ya que es muy probable que la próxima coalición contenga partidos diferentes a la anterior, aunque el canciller siga siendo del mismo partido", argumenta.
Edmond de Rothschild AM: "La falta de carisma de Laschet podría ser fuente de cierta preocupación para el mercado"
No opina así François Raynaud, gestor de fondos en Edmond de Rothschild AM, para quien "la falta de carisma de Laschet podría ser fuente de cierta preocupación para el mercado, que podría dudar de su capacidad para imponer sus puntos de vista", señala.
Impacto en la deuda y el euro
Más sensible es el efecto que el futuro canciller puede provocar sobre la renta fija europea. "Para los mercados de bonos y, en concreto, para los diferenciales de Italia y España, veríamos, según nuestro análisis, casi cualquier resultado de las elecciones como ligeramente positivo", predice Raynaud. El interés del bund a 10 años continúa en terreno negativo en el entorno del -0,45%.
"La cuestión más importante será la posición del nuevo Gobierno sobre la cláusula de no rescate y una posible mutualización de la deuda en la UE", indica Saxinger. En este sentido, el gestor de Oddo BHF se muestra optimista, recordando que Laschet se reunió personalmente con Emmanuel Macron tres veces solo en 2020, "lo que es bastante inusual para un primer ministro de un estado federal, incluso para el más grande de Alemania. Además, la futura ausencia del Reino Unido en la UE podría ayudar a que la cooperación francoalemana avance más rápido y en unidad", argumenta el gestor.
ODDO BHF: "La cuestión más importante será la posición del nuevo Gobierno sobre la cláusula de no rescate y una posible mutualización de la deuda en la UE"
Cuestión distinta es el endeudamiento general y los niveles de deuda a largo plazo. Desde Scope Ratings recuerdan que el bund activó el año pasado la cláusula general de excepción de su límite de endeudamiento en respuesta a la pandemia, que se espera que se aplique de nuevo a partir de 2023. "El próximo Gobierno decidirá el calendario y las particularidades del restablecimiento de la regulación del freno de la deuda de Alemania, que también tendrá importantes implicaciones a nivel europeo", apunta el proveedor de ratings.
En cuanto al impacto sobre la moneda común, en mínimos anuales frente al dólar, el experto de Edmond de Rothschild cree que la incertidumbre política pesará a corto plazo sobre todo en la debilidad relativa del euro frente al dólar. A medio plazo y a nivel europeo, "se espera que el impacto sea positivo", augura.