Este viernes ha sido un día de caídas generalizadas en los índices de la bolsa estadounidense. El Dow Jones retrocede un 1,58% hasta los 33.290,08 puntos; el S&P 500 cae un 1,31% y se sitúa en las 4.166,45 unidades, el Nasdaq Compuesto cede un 0,92% hasta los 14.030,38 enteros, y el Nasdaq 100 se deja un 0,81% y cae a los 14.049,58 puntos, el día siguiente a batir otro récord en bolsa.
Con respecto al viernes pasado, en lo que va de semana el Dow Jones pierde un 3,45%: se convierte en la segunda peor semana del año para el índice más veterano de Wall Street. La peor caída fue la que experimentó durante la última semana de enero.
Por su parte, el S&P 500 retrocede un 1,56% en la semana, siendo en este caso la peor semana desde la que finalizó el 26 de febrero.
Por último, el Nasdaq 100 registra una subida del 0,37% con respecto al viernes pasado y acumula cinco semanas consecutivas al alza, que han llevado al índice tecnológico a un nuevo máximo histórico este jueves.
Las caídas de este viernes se producen mientras la Reserva Federal "pone en peligro el negocio de la reflación que ha que ha dominado los mercados este año". Materias primas como el cobre y el dólar han alcanzado sus máximos de los dos últimos meses, según informa Bloomberg.
"La rotación inversa continúa", ha dicho Giorgio Caputo, gestor de fondos sénior en la firma de inversión J. O. Hambro Capital Management, en unas declaraciones recogidas por Bloomberg. "En un determinado momento, una Fed de línea dura no es bueno para nadie", ha subrayado el experto.
En lo que va de año, el Dow Jones acumula una rentabilidad del 8,77%; el S&P 500 gana un 11,21% y el Nasdaq 100 se revaloriza un 9,01%.