
Que la preocupación por el medio ambiente está marcando las agendas políticas tanto en Europa como en Estados Unidos es ya un hecho, y también lo es que esa preocupación se ha trasladado a los inversores. Así queda de manifiesto en la la encuesta 2021 Global Climate Survey de la gestora Robeco, realizada por CoreData Research, que revela que el 86% de los inversores sitúa el cambio climático "en el centro de su política de inversión, o como un factor significativo en ella", en los próximos dos años.
Este porcentaje se ha disparado desde 2019, cuando estaba en el 33%. De ese 86%, el 44% corresponde a inversores que afirman que el cambio climático estará concretamente "en el centro" de su política inversora.
Este sondeo se realizó el pasado mes de enero entre 300 de los mayores inversores institucionales y wholesale (término con el que se conoce en la jerga financiera a los distribuidores, como las entidades financieras) de Europa, Norteamérica y Asia-Pacífico, que vienen a representar unos 23,4 billones de dólares bajo gestión (19,79 billones de euros).
Más del 40% de los inversores mundiales no ha desinvertido de los activos más contaminantes en el último lustro
El 81% de los participantes en la encuesta afirmó que las renovables, la bioenergía y el hidrógeno son "los factores de descarbonización más relevantes" para sus firmas. Otra de las conclusiones que arroja este informe es que un 18,8% de las carteras de inversores institucionales desinvertirá de activos intensivos en carbono durante los próximos cinco años. El dato no parece especialmente elevado, aunque supera con mucho el de cinco años atrás, cuando era del 6,2%. En cualquier caso, más del 40% de los inversores mundiales no ha desinvertido de activos intensivos de carbono en el último lustro.
Por otro lado, el el 66% de los encuestados espera "focalizarse en la descarbonización de los activos globales" en los próximos dos años; y el 69% considera que el objetivo del Acuerdo de París sobre el calentamiento global "es alcanzable si se producen grandes cambios económicos y sociales", aunque 80 de cada 100 consideran que los gobiernos tendrían que "hacer mucho más para lograrlo" (dicho Acuerdo busca mantener el aumento medio de la temperatura global por debajo de los 2 grados centígrados sobre los niveles preindustriales).
'Descarbonizar' las carteras
El avance hacia una economía baja en carbono ha pasado de ser "un tema controvertido hace unos años" a "una prioridad para muchos inversores", se señala entre las conclusiones del sondeo, que pone de relieve que "inversores institucionales y wholesale suelen tener una perspectiva de largo plazo, y aceptan que es necesario actuar para evitar que el cambio climático afecte negativamente" a las carteras.
Como consecuencia de ello, esos inversores irán saliendo de activos intensivos en carbón; es probable "que apliquen filtros de descarbonización a todas las clases de activos", advierten desde Robeco.