
A escasas semanas de que Trump abandone la Casa Blanca y de que su predecesor, el demócrata Joe Biden, se ponga al frente de Estados Unidos, los inversores de Wall Street siguen de cerca los movimientos del nuevo gobierno e intentan dilucidar cómo podrían ser los siguientes cuatro años en el parqué norteamericano.
Echando la vista atrás, lo cierto es que desde que el Nasdaq cotiza (1985), a los tres principales índices de Wall Street les sienta más que bien el color azul.
En el caso del Dow Jones, el selectivo sube un 6,4% de media cada año que la Casa Blanca está liderada por los republicanos, si el mando lo ocupan los demócratas la revalorización se duplica y se sitúa en un 13,8%.
Cuando el partido de Joe Biden ha liderado el país, el S&P 500 ha subido de media un 14,15% cada ejercicio, sin embargo, de la mano de los republicanos el selectivo acostumbra a avanzar menos de la mitad, con un promedio de un 6,11% anualmente.
En el caso del selectivo tecnológico la disparidad es aún más grande. Con los republicanos en el poder el Nasdaq se ha revalorizado un 8,1% de media cada año, mientras que de la mano de los demócratas el promedio se triplica y asciende hasta el 26,7%.
Atentos a los movimientos de Biden
Las reacciones a medida que Biden va formando su gabinete parecen ser positivas en el parqué estadounidense. "Todos con los que he hablado, incluidas las personas de Wall Street, parecen muy contentos con las selecciones", asegura Bruce Heyman, exsocio de Goldman Sachs Group para Bloomberg. "Nadie me ha dicho que esto sea decepcionante. De hecho todo lo contrario, solo me dicen que es genial'".
El experto comenta que Wall Street ha visto con buenos ojos la elección de Biden de Kamala Harris como vicepresidenta y la elección de Yellen como secretaria del Tesoro en lugar de, por ejemplo, la senadora Elizabeth Warren, quien pidió la ruptura de los grandes bancos fue un alivio para los inversores.
Aunque también los hay más escépticos, Erika Karp, fundadora de la casa de inversiones Cornerstone Capital Group declaró para Bloomberg que la industria financiera siente "una esperanza a regañadientes" sobre el equipo de Biden. "Para mí, es una especie de sonrisa, con una ceja levantada. La ceja dice: 'Oh, esto podría ser interesante'", concluye la experta.