
Podría ser peor, pero Leonardo ha conseguido que su acción escape de la zona de los mínimos del año y supere los 6 euros, si bien aún está lejos de los máximos de junio y el precio de sus títulos valen la mitad de lo que valían a principios de año.
Pocas veces se da la circunstancia de que dos de las empresas en las que invierte el fondo Tressis Cartera Eco30, asesorado por elEconomista, sean noticia por tener negocios en común. Pero así es con el caso de Leonardo y Atos, la firma francesa de servicios digitales y el único fabricante de superordenadores de Europa.
De ahí que ambas unen fuerzas y sinergias para desarrollar un superordenador en Génova, donde tiene su sede Leonardo Labs, los laboratorios de I+D de la firma italiana. Leonardo también quiere su parte del pastel en el negocio de la megacomputación, el big data y los sistemas autónomos e inteligentes.
El precio de las acciones de Leonardo todavía no levantan cabeza en bolsa, incluso si el lunes despuntaron un 7%, su mayor subida diaria desde el 6 de abril. Este martes, han subido un ligero 0,3%, hasta alcanzar la zona de los 6,03 euros, pero en lo que va de año su precio ha caído un 42%.
En junio, alcanzó los 7,14 euros, del que ahora le separa un 18,4%, y a principios de año llegó a tocar los 11,82 euros al término de una sesión: un 96% por encima del precio actual.
Y, sin embargo, el 80% de los 21 analistas que siguen la actividad de la compañía y que recoge Bloomberg, recomiendan comprar las acciones de Leonardo para incluirlas en cartera. Ninguno de esos analistas aconseja venderlas.
"Los fabricantes de aeronaves y sus proveedores verán años de beneficios y flujo de caja deprimidos conforme el transporte aéreo se recupera de la devastación causada por la Covid-19", informan desde Bloomberg Intelligence. "Las aerolíneas podrían no volver a ganar un beneficio sólido y generar caja al menos hasta 2023", añaden.
Es cierto que el negocio de Leonardo en lo que respecta a todo lo que vuela está más enfocado en el sector de la defensa y apenas en el civil, aunque a parte de helicópteros y otros aviones de combate, la firma italiana diseña y produce sistemas electrónicos de navegación.
El beneficio operativo (ebitda) de Leonardo será de 1.358 millones de euros en 2020, un 25% menos de lo que pronosticaba en enero el consenso de mercado que recoge FactSet. A principios de año, se hablaba de 1.800 millones. Ahora, para superar los 1.800 millones habrá que esperar a 2022 y entre 2019 y 2022 la compañía ganará un 22% más.
"La posición de efectivo de Leonardo permanerá débil mientras los efectos de la Covid-19 probablemente lleguen a su punto álgido en el segundo trimestre del año, con la caída del beneficio ebita [beneficio antes de impuestos, intereses y amortizaciones] y los márgenes, dañando la generación de efectivo", señalan los expertos de Bloomberg.
"Asumiendo la entrega de 15 alas giratorias frente a 42 en el segundo trimestre de 2019 y un 15% menos de servicios, las ventas de helicópteros podrían caer un 38% [en el segundo trimestre de 2020], hasta los 674 millones de euros y el ebita a los 10 millones de euros", explican los analistas George Ferguson y François Duflot.
Leonardo cotiza a 5,6 veces beneficios frente a la media de 25,3 veces de la industria de la defensa
En cambio, subrayan que los ingresos y los beneficios del área de electrónica y defensa es probable que sean más resistentes, "apoyados por unos contratos más robustos con el Ejército y la Armada estadounidenses", destacan, "aunque los problemas de la cadena de suministro pueden reducir los ingresos en un 7%, hasta los 1.400 millones de euros".
En cuanto a la liquidez, los expertos recalcan que a finales del segundo trimestre podría estar por debajo de los 700 millones de euros, aunque la liquidez podría aumentar hasta los 5.000 millones por un nuevo mecanismo de financiación.
Ha sido tal la caída de las previsiones de beneficio para Leonardo, así como la caída en bolsa este año, que el fabricante italiano es el miembro del sector cuyos beneficios cotizan más baratos en bolsa en comparación con el precio de su acción. Leonardo cotiza a 5,6 veces beneficios, según las estimaciones para 2021 del consenso de analistas, frente a la media de 25,3 veces de la industria de la defensa, de la que forman parte nombres como Boeing, Safran, Airbus o Lockheed Martin.